La mayoría de primates están en peligro de extinción y los BIOPARC se vuelcan en su conservación

Para muchas personas una fecha como el 1 de septiembre significa el fin de las vacaciones con el inicio de la rutina y con esta visión antropocéntrica que domina ahora el mundo esto puede ser “traumático”. Desde la Fundación BIOPARC y los parques de Fuengirola, Valencia y el Acuario de Gijón, se pretende abrir los ojos hacia otras realidades que tienen lugar ese mismo 1 de septiembre como la conmemoración del Día Internacional de los Primates. En vísperas de esta efeméride se quiere denunciar que muchas de estas especies se enfrentan a un “fin” verdaderamente trágico, pues cada vez está más cerca su extinción y que solo está en nuestra mano la oportunidad de evitarlo.

Según la ordenación biológica, los primates se dividen en prosimios, monos y simios y los BIOPARC de Fuengirola y Valencia acogen las especies más representativas de esta clasificación con el objetivo de su preservación. En todos los casos estos grupos bajo cuidado humano se han creado siguiendo las recomendaciones de los programas europeos de conservación de especies amenazadas (EEP) que cuentan con expertos comités para coordinar una reproducción controlada que garantice la supervivencia de cada especie evitando endogamias y velando por el bienestar de cada individuo. Prestigiosas entidades como la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) que elabora la tristemente famosa Lista Roja en la que se incluyen todas estas especies, han manifestado la necesaria implicación de los parques de animales en estas acciones ex situ si queremos impedir su extinción. En España los BIOPARC son un referente en este sentido. Albergan la mayor variedad de especies de lémures (endémicos de Madagascar): cola anillada, de collar blanco y negro, de collar rojo, el negro, el vientre rojo, el mangosta y el frentirrojo.

También la única familia reproductora de gibón de mejillas doradas; los grupos más numerosos de gorilas, chimpancés, driles y talapoínes. La espectacular ampliación este año de BIOPARC Fuengirola con un nuevo hábitat inspirado en la histórica primera circunnavegación del mundo realizada por Juan Sebastián Elcano, ahora se pueden ver especies del continente americano como el Saki de cara blanca o los titís león dorado, de Goeld, emperador y el cobrizo o Socayo rojo.

El conocimiento científico sobre primatología permite realizar con el mejor criterio estas acciones conservacionistas, pero además hacerlo incorporando los más altos estándares de bienestar y cuidado animal ofreciendo entornos que favorezcan su desarrollo según las características propias de cada especie. El novedoso diseño de zooinmersión recrea las distintas selvas del planeta e incluso concibe recintos únicos donde conviven mangabeys y gorilas. Contar con personal especializado posibilita aplicar técnicas como los enriquecimientos ambientales y ahondar en otro objetivo igualmente fundamental, como es ser grandes plataformas de concienciación de la sociedad, ofreciendo información y acercando la belleza de esta naturaleza salvaje amenazada para movilizar hacia su protección.

En esta visión global de defensa de la biodiversidad, BIOPARC se adentra en el medio marino con el Acuario de Gijón y fija en la Fundación BIOPARC la estrategia de preservación de los hábitats de origen con la participación en relevantes proyectos dirigidos a primates. Entre ellos, gorilas con el Ebo Forest Research Project, la Borneo Nature Foundation dedicada a orangutanes o el Instituto Jane Goodall donde se financia parcialmente parte del programa de reforestación y sostenibilidad agroforestal en el hábitat de chimpancés en Kédougou (Senegal).

Despertar el interés de las personas hacia el medioambiente es básico, así como trasladar información sobre animales tan singulares como los primates, con una extraordinaria variedad de más de 500 especies. Grandes simios de 200 kg, minúsculos monos, ágiles trepadores, con útiles colas o sin ellas, bípedos o cuadrúpedos, solitarios, de familias reducidas o de grupos muy numerosos, algunos son omnívoros y otros vegetarianos, dirigidos por matriarcados o con un macho dominante. Tanta pluralidad que se unifica en un concepto común, son fascinantes y tenemos la responsabilidad de velar por su futuro. En este contexto, contar con el apoyo social, aglutinar el esfuerzo de numerosas instituciones conservacionistas y el ímpetu de equipos profesionales es prioritario para que el Día Internacional de los Primates se convierta en una verdadera celebración.