La vicepresidenta cuarta del Gobierno y responsable de la desescalada, Teresa Ribera, sitúa en julio la vuelta del turismo extranjero a España en condiciones de seguridad y advierte en una entrevista con Efe de que una prematura apertura masiva sería una "irresponsabilidad" que podría poner en riesgo a la población española.

"Tenemos que ir con mucho cuidado sobre cómo la persona que viene no corre riesgo, porque llega a un destino seguro, y al mismo tiempo no supone un riesgo para la población local. (...) Nuestra idea es que podamos trabajar sobre orígenes y destinos seguros más bien pensando en el mes de julio que en el de junio", ha sostenido Ribera. El Gobierno de España no da por perdida totalmente la temporada estival. Otros países como Grecia, con muchos menos contagiados y fallecidos, se presenta como la gran alternativa y amenaza de España este verano.