Catana con la que casi mata a la víctima. FOTO POLICÍA
Agentes de la Policía Nacional han
detenido en una pensión del distrito Centro de Valencia a un hombre de 32 años,
de origen burkinés, como presunto autor de los delitos de allanamiento de
morada, daños, amenazas y robo con violencia e intimidación, tras al parecer
acceder a una de las habitaciones rompiendo el cerrojo de la puerta, amenazar y
golpear con una catana a la mujer que había dentro y seguidamente romper el
mobiliario y rociar la habitación con amoniaco al mismo tiempo que manifestaba
que iba a quemarlo todo. Los agentes intervinieron la catana y dos teléfonos
móviles, uno de ellos propiedad de la víctima a la que le fue entregado.
Los hechos ocurrieron cuando los
agentes que realizaban labores de prevención fueron alertados por la Sala del
091 para que se dirigiesen a una pensión del distrito Centro de Valencia donde
un indicativo de Policía Científica, que acudía a realizar una inspección,
había sido requerido por una mujer que al parecer había sido agredida por un
hombre.
Inmediatamente, los policías se
dirigieron al lugar donde observaron a un hombre en las escaleras junto a un
policía y a una mujer averiguando que momentos antes éste al parecer había
entrado en la habitación de ella tras propinar diversos golpes a la puerta y
finalmente romper el cerrojo. Una vez dentro, la había amenazado y golpeado con
una catana y seguidamente había roto el mobiliario de la habitación y esparcido
amoniaco al mismo tiempo que la amenazaba con quemar todo.
La víctima, al parecer había
tratado de avisar a la policía con su teléfono móvil momento en que el
sospechoso se percató y se lo sustrajo al mismo tiempo que le propinaba un
empujón, aprovechando ésta para salir de la habitación y pedir ayuda,
encontrándose con un indicativo policial.
Los policías junto a la víctima
accedieron al interior de la habitación comprobando que la puerta estaba rota,
el interior revuelto y destrozado y olor a amoniaco, así como localizaron en el
suelo una catana, por lo que tras realizar diversas comprobaciones detuvieron
al sospechoso como presunto autor de los delitos de allanamiento de morada,
daños, amenazas y robo con violencia e intimidación.
La víctima, una mujer de 38
años, de origen checo, presentaba un golpe en la cabeza y excoriaciones en el
cuello y brazos.
Finalmente, los agentes le
realizaron un cacheo superficial localizándole entre sus ropas dos teléfonos
móviles, uno de los cuales era propiedad de la víctima a la que le fue
entregado.
El detenido, con numerosos antecedentes
policiales, ha pasado a disposición judicial.
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