Los hosteleros de Russafa estudian movilizaciones contra la declaración del barrio como Zona Acústicamente Saturada

Los hosteleros de Russafa han mostrado su "más firme rechazo" ante la declaración de este barrio de Valencia como una Zona Acústicamente Saturada (ZAS) en una decisión que criminaliza la actividad de un sector que fue esencial en la recuperación de zona.

Aunque desde Al Balansí (la Asociación para una Hostelería Responsable en Russafa) se ha realizado "una llamada a la prudencia" hasta no conocer al detalle el contenido de la declaración de la ZAS, los miembros de esta agrupación si que advierten que la aprobación de las nuevas normas del ayuntamiento supondrían "un fracaso para el Consistorio y para la ciudad, y un nuevo varapalo para el sector del turismo y de la hostelería de la ciudad de Valencia".

Los hosteleros lamentan que se les criminalice justo cuando más esfuerzos se están realizando desde sus negocios para neutralizar los ruidos propios de su actividad comercial. En un comunicado remitido a los medios, los medios de Al Abalansí aseguran que la declaración de la ZAS por parte del concejal de Mejora Climática, Acústica y Eficiencia Energética, Carlos Mundina, "supone torpedear el plan de medidas preventivas puestas en marcha por el mismo Ayuntamiento. Unas medidas que están en pleno proceso de ejecución, como el plan de formación sobre la promoción del civismo y las conductas responsables en las zonas de ocio, que esta misma semana se ha realizado y que pretendía servir de modelo de actuación e intervención en concienciación sobre conductas responsables del público en el entorno de las zonas de ocio".

 

Asimismo, la Asociación por una Hostelería Responsable en Russafa se ve en la necesidad de denunciar la "profunda contradicción por parte de la Concejalia que dirige Mundina, que supone el cambio radical del criterio de actuación del Consistorio, frente a un plan de medidas preventivas aprobado en el mes de junio, y sin más explicación ni razones, se convierte en una ZAS apenas tres meses después, lo que supone una nueva estigmatización de las pymes y trabajadores del sector hostelero".

Por todo lo dicho, la asociación hostelera anuncia la activación de un urgente proceso de reflexión y debate sectorial a través de la reunión que se ha convocado, con carácter urgente en el barrio, para el próximo lunes 23 de septiembre, en las que valorará el inicio de una nueva etapa de movilizaciones para reivindicar los derechos de los trabajadores y de las pymes del ocio, la hostelería y el turismo.

 

En este contexto, hosteleros y comerciantes reclaman la intervención de la alcaldesa, Maria José Catalá, a la que ayer mismo solicitaron una reunión, teniendo en cuenta la "precipitación y encadenamiento de los acontecimientos que han llevado a una aprobación exprés de una ZAS. Todo ello, cuando más y mejor estaban trabajando las pymes hosteleras con las distintas áreas del Ayuntamiento implicadas en el diseño, desarrollo y ejecución de un plan de medidas preventivas que ya venía ofreciendo sus primeros resultados y que ahora puede quedar en suspenso".