Uno de los debates más encarnizados en la presente legislatura ha sido la instauración o no de una tasa turística en la Comunitat Valenciana. La medida, fuertemente defendida por Compromís, busca según sus defensores evitar que los ciudadanos tengan que pagar los costes de la sobrecarga de servicio y recursos hídricos que conlleva la afluencia masiva de turistas; pero sus críticos señalan que la medida no es más que un impuesto que puede espantar a los turistas que ya aportan al erario público con sus consumiciones.

El debate es divisivo tanto en la ciudad como en las instituciones, llegando a crear esa legislatura fuertes discrepancias entre socios de gobierno tan aparentemente unidos como PSPV y Compromís, y con la firme oposición del Secretario Autonómico de Turismo, Francesc Colomer.

Ante este importante tema, El Periódico de Aquí ha preguntado, a través de la empresa demoscópica SyM Consulting, cual es la opinión de los vecinos de Valencia sobre este tema. Los resultados, son claros. Los detractores de este impuesto superan en casi 10 puntos a sus defensores. En concreto un 44,8% de los encuestados se proclama contrarios a la implantación de la tasa turística en Valencia, mientras que un 34,6% la apoya. Un 20,7% de los encuestados prefirió no compartir su opinión sobre el tema.

En este tema el rechazo es prácticamente igual entre mujeres y hombres, con un 44,3% de féminas y un 45,2% de hombres en contra de la tasa, mientras que entre la gente a favor las mujeres están algo por delante de los hombres con un 36,6% frente a un 32,6% de respuestas positivas. Esta diferencia se explica en parte porque hay más hombres indecisos sobre el tema, 22,2%, frente al 19,3% de las mujeres.

En cuanto al análisis por edades la pauta parece bastante clara: cuanto mayor se es más a favor está de que los turistas paguen un añadido por su visita a la ciudad.

De esta manera los mayores de 65 años lideran el bando de los partidarios de instaurar la tasa con un aplastante 65,3% de respuestas frente a tan sólo un 11,6% de mayores que creen que no es el momento de subir los impuestos.

En frente tienen a los votantes de entre 18 y 30 años donde los resultados son aún más contundentes. Un 83,1% de los encuestados de esta edad se negó a aplicar la tasa en Valencia y tan sólo un 6,6% lo consideró una buena medida.

Entre las demás franjas de edad la pauta se repite aunque con porcentajes más moderados. Así pues los votantes de entre 45 y 64 años, la segunda franja de edad, la mayor parte está a favor con un 38% de aceptación, pero se porcentaje apenas vence a los opositores que se se sitúan en un 36,7%, todo merced a que un cuarto de los encuestados (25,3%) de esta edad no tiene opinión sobre el tema o no quiere compartirla.

En la segunda franja más joven ,de 31 a 44, el no gana al sí por mayoría absoluta de un 54,2% de opositores frente a un 21,5% de partidarios.

El sondeo de SyM Consulting demuestra que quienes más se oponen a la tasa turística son los votantes de Vox con un 60,3% de gente en contra, frente a tan sólo un 15,1% de partidarios.

Los más a favor son las personas que votaron a Compromís en 2019 donde sólo un 61,5% y mientras que sólo un 23,8% se muestra en contra.

Los segundos más a favor son los votantes de Podem/EU, con un 61,3% de los encuestados que aseguran haber votado a este partido a favor de la implantación del pago turístico, y un 19,4%, curiosamente el mismo porcentaje que en los indecisos, en contra de mismo.

Los terceros que más lo apoyan son los votantes socialistas, que a pesar de que sus líderes han hecho públicas sus reticencias sobre esta tasa tienen a la mayor parte de sus votantes a favor con un 50,9% de respuestas positivas y sólo un 28,8% de oposición.

En contra, además de Vox , están los votantes del PP con un 61,4% de encuestados en contra y un ínfimo 15,2% a favor, y los de Ciudadanos con un 57,4% de opositores y un 23,4% a favor.

Tal y como pasara con el transporte público el sesgo ideológico parece marcar las respuestas, aunque en esta ocasión con mucho más sentido ya que hablamos de una medida política y no de juzgar la realidad de un servicio. Así que para testar la opinión real de la ciudad es importante consultar que opinan las personas que no votaron a los grandes o directamente no comparten su ideología con los encuestadores.

En este sentido lo cierto es que la mayoría de estos ciudadanos “no alineados” están en contra de la tasa. Entre los votantes que aseguran que dieron su voto en 2019 a una formación minoritaria, el 43,5% se opone a la tasa frente al 30,4% que la aprueba; entre quienes no votaron en las últimas elecciones, ya sea por decisión propia o por no tener la edad legal, el 59,5% se opone frontalmente al impuesto con sólo un 21,6% a favor; mientras que en los que se acogieron al “No sabe/No Contesta” en la pregunta de a quien votaron en 2019 el 51,7% se mostró en contra, y el 27,6% a favor.