Según datos del último Informe del Mercado de Trabajo de los Mayores de 45 años 2019, elaborado
por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y analizado por la Fundación
Adecco, más de la mitad de los parados en España son mayores de 45 años,
incorporándose a esta franja de edad más de un millón de personas en el último
lustro.
En la Comunidad Valencia, la cifra de parados mayores
de 45 se ha reducido un 18% en estos últimos cinco años, hasta 194.899.
Sin embargo, su porcentaje respecto al total de parados valencianos aumenta hasta
el 53,5%.
El
envejecimiento de la sociedad valenciana aumenta de manera constante, y la
población senior (mayor de 45 años) representa casi la mitad de la población
(47,5%) con 2.358.481 personas.
De hecho, el índice de envejecimiento en Valencia
también da cuenta de este fenómeno, pues en el último año se contabilizaron 123
mayores de 64 años por cada 100 jóvenes menores de 16 (122,62). Si nos
remontamos una década atrás, en 2009 este índice era 101, suponiendo un
incremento del 18,4% en ese periodo.
Este desequilibrio, ocasionado principalmente por la baja
natalidad y el incremento de la esperanza de vida, pone en jaque la
sostenibilidad en un futuro próximo del sistema de pensiones, que actualmente
cuenta, a nivel nacional, con un ratio
de 2,3 afiliados a la seguridad social por cada pensionista, muy próximo al
límite de 2 que establecen los expertos para asegurar la sostenibilidad del
sistema.
Este es un asunto de vital importancia para el Gobierno, que
ya ha puesto en marcha la Estrategia
Nacional frente al Reto Demográfico. Una estrategia que se basa en tres
desafíos demográficos: el progresivo envejecimiento poblacional, el despoblamiento
rural y los efectos de la población flotante. El reto demográfico de nuestro
país, según dicha estrategia, debe mejorar nuestro modelo de convivencia,
vertebración territorial y mejorar la cohesión social asegurando el relevo
intergeneracional
El envejecimiento del mercado laboral
El
incremento de la población mayor de 45 años ha tenido como consecuencia que la población activa en esta franja de edad
haya aumentado en algo más de un millón
de personas en los últimos 5 años conduciendo hacia el envejecimiento del
mercado laboral. De hecho, la edad media de los trabajadores en España ha
pasado de los 39,7 años de 2007 a 43 años en la actualidad.
Desempleo
de los mayores de 45 años
En la Comunidad Valenciana, el año 2018 finalizó
con 364.297 demandantes de empleo parados, de los cuales 194.899 fueron mayores de 45 años, lo que representa el 53,5% del total.
Esta cifra ha disminuido un 4% respecto al año anterior, es decir, a finales de
2017 había 8.740 mayores de 45 años más en paro.
Según Francisco
Mesonero, director general de la Fundación Adecco, “aunque somos optimistas en el corto plazo al observar que se consolidan
los datos de generación de empleo para los trabajadores mayores de 45 años, nos
preocupa la inacción que existe para hacer frente al envejecimiento de la
sociedad española y el consiguiente impacto sobre el mercado laboral, el
sistema de pensiones y la competitividad de nuestras empresas en el medio
plazo. Nos jugamos mucho, nos jugamos el futuro y la competitividad de nuestro
mercado laboral; se nos acaba el tiempo para actuar”.
Contratación y afiliación
La cifra de contratos a valencianos
mayores de 45 años
sigue aumentando, llegando a los 501.640 (24% del total de contrataciones en la
región), casi 30.000 más que el año pasado (471.975). Aunque se trata de un
dato positivo, que continúa la tendencia alcista de los últimos años, es el
menor incremento del último lustro (6,3%).
A
pesar de que, a nivel nacional, prácticamente el 90% de los contratos que se
firmaron el año pasado con personas mayores de 45 años fueron de carácter
temporal a tiempo completo, es importante para la recuperación que en este
periodo ha aumentado más la contratación indefinida (24,83%) en comparación con
el incremento de los contratos temporales (5,97%).
En
Valencia, dos tercios de los nuevos contratos de los mayores de 45 se
concentran en el sector servicios (65%). Le sigue el sector industrial, con un
14%, la agricultura (13%) y la construcción (8%).
Según Francisco Mesonero,
director general de la Fundación Adecco, “la recuperación del mercado laboral desde el año 2014,
junto con las políticas activas de empleo, han favorecido la contratación de
personas mayores de 45 años, sin embargo, todavía hay 200.000 valencianos que
necesitan una oportunidad. Además, debemos hacer que esta situación se
consolide de manera sostenible mediante la formación continua, el reciclaje de
competencias y concienciando sobre el valor de la diversidad y la experiencia
que aportan los profesionales senior al mercado laboral”.
El paro de larga duración
senior: vulnerabilidad y exclusión social
En
España, el paro de larga duración, es decir, aquellas situaciones de desempleo
que se prolongan más de un año, es otro de los puntos débiles de los parados
senior, afectando esta situación al 55,09% de ellos, tres puntos porcentuales
superior al dato de la población en general (51,69%). Se podría destacar como
dato positivo la disminución en dos puntos porcentuales con respecto al año
anterior.
Según
Francisco Mesonero, “el desempleo de
larga duración es uno de los factores más determinantes para que una persona
acabe en situación de exclusión social según el último informe presentado por
la Fundación FOESSA sobre Exclusión
social y desarrollo en España el pasado mes de junio. Hay que actuar mediante
la aplicación de políticas activas de empleo que dinamicen el mercado laboral y
fomenten la contratación, políticas pasivas de empleo que protejan frente a la
exclusión y políticas de diversidad e inclusión en las que se priorice el
talento de los distintos profesionales frente aspectos sociodemográfico que no
aportan valor a su candidatura”.
Feminización
del desempleo senior
Las
valencianas desempleadas mayores de 45 años representan el 59,34% del total en
este rango de edad. En valores absolutos, el número de mujeres desempleadas mayores
de 45 años es 115.653 frente a los 79.246 hombres. Si bien es verdad que este
número de paradas valencianas ha descendido un 2,20% respecto al año pasado.
Sin embargo, en el caso de los hombres, el número de demandantes de empleo parados
se ha reducido más rápidamente, disminuyendo un 7,2% en el último año.
Por
lo tanto, es un hecho que existen desequilibrios asociados al género, que
también se dan en la cifra de activos y ocupados: 495.500 activas frente a 598.700
activos varones, y 412.500 ocupadas frente a 536.200 ocupados valencianos. En
ambos casos, la cifra de mujeres ha mejorado respecto al año anterior alrededor
de un 4%, y en los hombres, un 6% en los ocupados y el 2,7% en los activos.
Estas diferencias dan cuenta de que hay una desigualdad latente entre ambos
sexos que, sin embargo, tiende a igualarse. De hecho, si nos remontamos 10 años
atrás, desde 2008 el número de activas se ha incrementado un 50% y solo el 23,8%
en el caso de los activos valencianos. En la misma línea, las contrataciones
también son mayoritarias en los hombres pues representan el 58,8%.
Según
Francisco Mesonero “las mujeres senior aún encuentran más dificultades que los
hombres a la hora de encontrar un empleo. Si bien, es verdad que la evolución
de los últimos años es muy positiva, no podemos bajar la guardia en políticas
de igualdad y conciliación cuyas ausencias tradicionalmente han sido las
responsables del abandono del mercado laboral por maternidad y cuidados
familiares. Y tras varios años de inactividad, las probabilidades de encontrar
trabajo disminuyen. Afortunadamente, este rol que antes tenía casi
exclusivamente la mujer ha comenzado a compartirse y es más fácil conciliar
trabajo y responsabilidades familiares”.
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