El vecino de Albalat Joaquín Gil, más conocido como ?El Hierbas?. EPDA La medicina alternativa no es algo que se haya inventado ahora. Y si no que se lo digan a Joaquín Gil, un vecino de 91 años de edad de Albalat dels Tarongers, que toda la vida se ha medicado a través de plantas naturales. Incluso los vecinos le conocen como "El Hierbas", un apodo que bien define su afición por la naturaleza y la montaña.
Tras enumerar las virtudes del tomillo, el rabo de gato, la manzanilla, el té, el poleo o la arenaria, Joaquín recuerda cómo los vecinos acudían a él para curar los resfriados o los dolores de estómago. "Venían a pedirme las hierbas y yo según la dolencia que tenían les daba unas u otras. Al día siguiente volvían para felicitarme pues habían mejorado gracias a las hierbas", narra satisfecho este vecino de Albalat dels Tarongers. "Incluso hoy en día alguna vez vienen a preguntarme qué pueden tomar para el dolor", destaca.
Todo comenzó cuando Joaquín se puso a trabajar de guardia rural en el municipio y su proximidad con la montaña y la naturaleza le despertó el interés por las hierbas y sus efectos curativos. Comenzó a indagar en el tema y adquirió numerosos libros instructivos, que hoy en día todavía conserva. "Mi sueño hubiera sido ser herbolario y trabajar en una herboristería", afirma Joaquín. Él mismo secaba las hierbas, las cortaba y las distribuía en pequeñas bolsas para los vecinos. Ahora sólo conserva los conocimientos, porque a la montaña ya no puede subir, pero satisfecho de haber ayudado a sus vecinos durante todos estos años.
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