Orriols exige al Ayuntamiento de Valencia mejoras urgentes en seguridad vial, espacio público y servicios esenciales

La plataforma vecinal Orriols en Lucha ha presentado una batería de propuestas en el marco de los presupuestos participativos del Ayuntamiento de València, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de uno de los barrios más castigados por la falta de inversión pública. Entre sus demandas destacan la mejora urgente de la seguridad vial, el reacondicionamiento del espacio público, la instalación de mobiliario urbano retirado sin consenso y el refuerzo de servicios básicos como el alumbrado y el acceso a la cultura en valenciano.

Una de las principales reclamaciones vecinales es la intervención en el cruce de la calle Duque de Mandas con la calle Arquitecto Rodríguez, un punto que consideran crítico en materia de seguridad vial. Desde hace años, vecinos y vecinas denuncian la peligrosidad del cruce, donde los vehículos circulan a gran velocidad y con escasa visibilidad para peatones.

Orriols en Lucha propone la instalación de un semáforo para reducir la velocidad en la calle Duque de Mandas, así como la reubicación y mejora de la visibilidad del paso de peatones en Arquitecto Rodríguez. Además, reclaman la elevación de los pasos de cebra, una medida ya aplicada en otros barrios, para reducir la velocidad del tráfico y facilitar la accesibilidad.

Otra propuesta destacada es la ampliación de la acera en el tramo de los números pares de la calle Santiago Rusiñol, entre Esteban Dolz y Arquitecto Rodríguez. Se trata de una zona clave de paso, junto al instituto, el polideportivo Marni y la alquería de Albors, donde las aceras son más estrechas que en el resto de la calle.

Los vecinos piden igualar este tramo con el resto de la vía, incluyendo arbolado, bancos, papeleras y pasos de peatones seguros para cruzar hacia equipamientos públicos. "No tiene sentido que justo donde más tránsito hay, la acera sea más angosta y sin mobiliario", denuncian desde la plataforma.

La retirada, en 2024, de las cuatro mesas de picnic instaladas en la plaza de la Ermita sin consenso vecinal sigue generando malestar. Las mesas, instaladas en 2018 tras un proceso participativo, eran uno de los pocos espacios de socialización para familias, niños y personas mayores.

Desde Orriols en Lucha reclaman su reposición inmediata, subrayando que su uso era constante y que su retirada ha supuesto una pérdida de calidad de vida para los residentes del barrio. "No pedimos nada nuevo, solo que se respete lo que el vecindario decidió y utilizaba diariamente", explican.

Las calles Padre Viñas y San Juan Bosco, dos de las arterias principales del barrio, requieren una renovación completa del asfaltado. El paso continuo de vehículos y transporte público ha deteriorado el firme, provocando ruidos y molestias, además de un mayor desgaste.

Aunque se han hecho parcheados en los últimos años, los vecinos aseguran que son insuficientes y solicitan una intervención integral que reduzca la necesidad de mantenimiento frecuente y mejore la movilidad y el descanso del vecindario.

La iluminación de las calles Duque de Mandas y San Juan de la Peña también figura entre las preocupaciones vecinales. Las actuales farolas, ocultas entre las copas de los árboles, generan zonas oscuras en las aceras que aumentan la percepción de inseguridad.

La propuesta plantea sustituir las farolas por un modelo más eficiente y reubicarlas para que iluminen las aceras sin afectar al arbolado existente.

La necesidad de descanso en los desplazamientos diarios de las personas mayores ha llevado a Orriols en Lucha a solicitar nuevos bancos en dos puntos estratégicos: la entrada al Centro de Actividades de Personas Mayores y a lo largo de la acera sur de la avenida Hermanos Machado.

En el primero, se trata de recuperar bancos retirados frente a un punto habitual de espera. En el segundo, proponen instalar bancos entre Orriols y la avenida Alfahuir, en una acera ajardinada muy transitada por personas mayores que hacen ejercicio o pasean.

La plataforma también denuncia la escasa presencia de literatura en valenciano en la biblioteca del barrio, aún provisional y de dimensiones reducidas. Piden una ampliación de los fondos infantiles, juveniles y adultos en lengua propia, y consideran inaceptable que tengan que desplazarse a otras bibliotecas para poder acceder a estos contenidos.

Por último, proponen instalar una fuente de agua fría y filtrada en el nuevo parque de la calle Agustín Lara, inaugurado en 2023. El parque, con zona infantil y de estancia, carece de fuente, lo que limita su uso en los días de calor. Sería, además, la primera fuente de este tipo en el barrio.

En total, el vecindario de Orriols ha presentado más de 40 propuestas, lideradas tanto por particulares como por colectivos vecinales, lo que convierte al barrio en uno de los más activos del distrito en los presupuestos participativos.

Además de las mejoras puntuales, muchas propuestas insisten en la reapertura del polideportivo cerrado, y en la necesidad de dotaciones públicas en los solares vacíos entre la avenida Alfahuir y la calle Motilla del Palancar, aunque el Ayuntamiento recuerda que estos terrenos son de propiedad privada y con uso educativo.

Las iniciativas impulsadas por Orriols en Lucha nacen de un proceso colectivo de diagnóstico y priorización de necesidades, y buscan mejorar de forma concreta y realista la vida del vecindario. La plataforma, además, se ha ofrecido a acompañar a personas con dificultades digitales para que puedan participar en el proceso, criticando la falta de accesibilidad del sistema actual.

"Después de siete ediciones, sigue siendo incomprensible que no se haya facilitado una forma sencilla para que las personas mayores puedan informarse y votar", concluyen desde el colectivo.