Papi Robles en un instante de la entrevista para El Periódico de Aquí. LAURA FLORENTINO ¿Se estrena como portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia? ¿Cómo está viviendo este cambio de papeles?
En realidad no hay mucho cambio, porque Joan y yo ya trabajábamos de manera conjunta. Ahora tengo una cara más visible, pero por suerte ya tuve un espacio de aprendizaje en Les Corts cuando fui síndica. Tengo mucha ilusión, Compromís per València es la mejor alternativa para esta ciudad. Es una responsabilidad, pero a mi los retos siempre me han gustado mucho.
Dio recientemente el salto de Les Corts a la plaza local. ¿Se siente más cómoda en el ámbito municipal?
Infinitamente. Me enamora el espacio cercano. La política se tiene que hacer de tú a tú. El Ayuntamiento es la primera línea que te lo permite. En este cargo puedes ir hablando con la gente día a día. Construyes tu ciudad, puedes influir en el entorno en el que vives de manera directa. Siempre me ha gustado la política local y ahora he reconfirmado que este es mi espacio.
En los últimos meses se la venía situando como heredera natural de Ribó. Pero en otros momentos se señaló a Campillo, Fuset o Galiana. ¿Por qué cree que ha sido usted la elegida?
Es normal que en su momento se hicieran previsiones de futuro y con personas además de Compromís que han estado totalmente implicadas. Pero las cosas han llegado como han llegado y cuando tienen que encajar encajan. Yo he ido haciendo mi progresión internamente y cuando ha sido necesario un relevo he podido ejercer ese rol. Podría haberlo ejercido otra persona. Pero las decisiones se tienen que tomar en su momento. Así es como han encajado las piezas. Pere o Sergi también son importantes dentro de este conjunto. Ellos siguen participando y son una pieza fundamental, aunque no sea desde esa primera línea.
Joan Ribó dejará de ser portavoz, pero no renuncia al acta de concejal, al menos de momento. ¿Siente que la están tutorizando?
Soy una amante del trabajo en equipo y sus evoluciones. Todos los equipos tienen que tener un liderazgo y eso se tiene que trabajar. Es normal que un liderazgo que empieza a estar de bajada confluya con el que está de subida. En el caso de Joan lo que hace es acompañar y compartir, en ningún caso tutorizar. Es uno de los relevos más libres que he conocido. Aporta confianza y visiones que no tengo. Por mí que Joan se quede mucho tiempo aquí, hay mucho que aprender de él.
Siempre que un candidato anuncia su retirada al poco de elecciones se abre el debate sobre lo lícito que es presentarse a un cargo si luego no se va a mantener un puesto en primera línea. ¿Cree que Ribó debería no haberse presentado a la alcaldía?
Entiendo que la decisión que se toma hoy se toma como portavoz de Compromís València. La decisión como alcalde sería otra, porque son otras responsabilidades. Joan es la cara visible de esta ciudad, con la que la ciudadanía se podía ver más representada. No puedo otra cosa que agradecer que se presentara al cargo de alcalde. Siempre puede haber interpretaciones, pero la decisión la toma el Joan Ribó de hoy, no el Joan Ribó de hace un año.
Aunque entiendo que la línea va a ser similar. ¿Cómo se va a diferenciar el estilo Papi Robles del de otros portavoces de Compromís?
El proyecto de Compromís es hacer que esta ciudad sea de sus vecinos y vecinas. Con ese planteamiento, sabemos que nuestra labor es tutorizar al gobierno y hacer propuestas de gobierno alternativo. No obstante, cada uno tenemos una forma de trabajar completamente diferentes. Joan es un tío super tranquilo y con unos ritmos más serenos y a mí siempre me ha caracterizado ser un torbellino. Trabajo con ritmos muy rápidos. Joan y yo somos como el yin y el yang. Yo intentaré aportar mi visión como mujer, madre de dos hijos frente a lo que Joan representaba.
También estamos viendo bastantes diferencias entre PSPV y Compromís en el trabajo de fiscalización. Parece que Compromís esté siendo algo menos combativo que el PSPV. ¿Comparte esta lectura?
En la variedad está el gusto. Cada partido de la oposición elige su perfil. Nosotros somos la fuerza mayoritaria de la oposición y nuestra alternativa a la señora Catalá va en dos líneas: combatir sus políticas que dinamitan la vida de las personas de esta ciudad y también ejercer de ese gobierno alternativo que tenemos la capacidad de ser, con propuestas constructivas. ¿Es una sorpresa? Tenemos todavía mucho recuerdo del Compromís de 2011, pero estamos en 2023. Nosotros ahora mismo somos la segunda fuerza de esta ciudad. Tenemos que responder desde la capacidad de mostrarle a la gente que otra manera de gestionar es posible.
Ya después de varios meses... ¿Qué lectura hacen de que Compromís perdiera las últimas elecciones municipales y el Partido Popular ganó en todos los distritos de la capital?
Hacemos dos análisis diferenciados. Esas elecciones el PP las encaró en clave estatal. La gente cuando fue a votar no tenía el marco conceptual de la ciudad. Además, nuestra gente estaba tan centrada en el trabajo de la gestión que no nos dedicamos en hacer la campaña que estaba haciendo el Partido Popular. Tienes que tener más tiempo para seducir a la gente y eso jugó en nuestra contra. Partíamos con una buena gestión reconocida por la ciudadanía en un contexto que no nos benefició y nosotros priorizamos nuestra responsabilidad como gobierno a nuestra responsabilidad para ganar las elecciones. Pero, a partir de ahí, a reconstruir.
En estos ocho años hemos visto encarecerse el precio de la vivienda en la ciudad en más de un 50%. ¿Cree que ha sido uno de los talones de Aquiles?
Me hubiese gustado que hubiéramos dejado un parque público de vivienda mucho más amplio y gestionar con el PSPV toda la estructura de vivienda de la ciudad de otra manera. Compromís ya en pandemia pedimos establecer una moratoria por el cambio de usos de licencias de apartamentos turísticos. Siendo un gobierno en solitario no estaríamos en la situación en la que estamos. También a nivel estatal y autonómico nos hubiese gustado que se hiciese el tanteo y retracto mucho antes. En cuanto se puso, Compromís adquirió 131 viviendas que ahora se otorga la señora Catalá. Hubiéramos querido establecer esta ciudad como zona tensionada, se hicieron las modificaciones en la ley estatal de vivienda, llegaron tarde. Nos hubiese gustado también que hubiesen procesos muchos más rápidos, pero no se dan. Del mismo modo, cuando llegamos AUMSA estaba arrasada y esperamos que ahora la línea de trabajo se mantenga. No hemos podido poner a disposición de la gente todo lo que nos hubiese gustado. Pero hay elementos que nos han frenado. No obstante, esperamos que esas 1.000 viviendas que dejamos en marcha se mantengan, aunque sea por esa propuesta de campaña tramposa de la señora Catalá.
La movilidad también ha sido un punto de conflicto. Se pusieron muchas trabas a la circulación pero no han habido grandes mejoras en transporte público. ¿Cree que la concejalía empezó la casa por el tejado?
Movilidad hizo todo lo que estaba en sus manos para cambiar el plan de movilidad de esta ciudad, con una propuesta sostenible. Pero una vez más, no se puede llegar a todo. Se ha tenido mucha valentía para crear una red de carriles bici reconocida a nivel global. En transporte público, encontramos la EMT totalmente endeudada, y el gobierno central nos pedía el cierre del servicio. Renovamos la flota de autobuses y revisamos las líneas. Se ha aumentado el número de usuarios y hemos conseguido que el gobierno central haga una aportación económica para la mejora del transporte. Hemos pedido poder gestionar la red de Cercanías porque es un drama como el ministerio la está gestionando y genera problemas en la ciudad. La gente que vive en Valencia ha dejado de usar el coche para moverse, pero la gente que viene de fuera no tiene esa opción. También en el metro hemos trabajado para tener mejor servicio y metro nocturno, así como la gratuidad en el servicio. Dicho todo esto, hasta que no tengamos unos servicios que permitan que sea mejor moverse en transporte público que coger un coche, queda mucho trabajo por hacer. Ha habido una gestión muy valiente por parte de Compromís, nos hubiese gustado ver la misma en otros partidos que gobiernan otras entidades.
La seguridad y la limpieza han sido los primeros grandes planes de choque del nuevo ejecutivo. ¿Cree que Valencia ha empeorado en estas dos áreas durante estos 8 años?
El PP es muy listo. Focalizan en seguridad y limpieza. Nosotros encontramos un contrato heredado y blindado que no nos permitía modificarlo. En estos ocho años hemos gestionado con ese contrato y poner una licitación que aumentaba el doble el presupuesto en limpieza y mejoraba las condiciones. Ese es el contrato que hemos dejado para que lo gestione la derecha y la extrema derecha. A nivel de seguridad, nosotros hemos incorporado 500 plazas de las cuales más de 300 ya están funcionando. Veníamos del subsuelo, tanto en limpieza como en seguridad.
¿Cuáles cree que han sido los mayores éxitos de la formación en la ciudad estas dos legislaturas?
Sin duda el cambio de modelo de ciudad, que nos dirige a la capital verde. Hemos pasado de ser un cenicero lleno de contaminación y carreteras a estar reconocidos por ser una ciudad con espacios abiertos, parques y jardines, cuidado de la huerta, red de movilidad. Hemos construido un modelo de ciudad habitable. Además, cuando llegamos en 2015 esta ciudad era reconocida como capital del endeudamiento y la corrupción.
Nosotros hemos salido con una marca muy clara de honradez, de buenos pagadores, y de saneamiento de las deudas publicas. Hemos bajado la deuda de la ciudad y hemos sido honestos y transparentes.
¿Qué valoración hace de este medio año de gobierno de derechas?
Tengo una valoración clarísima y es que no les importa esta ciudad. En seis meses hemos visto a la señora alcaldesa hacerse fotos con Aznar, Rajoy, con Ayuso, haciendo plenos sobre la amnistía. Catalá está muy preocupada por su contexto partidista. No está en los barrios que precisan la presencia de la alcaldesa. En los presupuestos hay cero marca gestión de la señora Catalá. Solo hay proyectos del anterior equipo de gobierno, más allá de una bajada de impuestos para los que más dinero tienen.
¿Le preocupa que la situación que atraviesa la coalición pueda afectar a la labor de oposición?
Todo el mundo sigue dentro de Compromís. Igual que en el resto de partidos hay corrientes y familias, en Compromís se dibujan a través de formaciones. Es cierto que determinadas personas han decidido recientemente en lugar de estar en una corriente, estar en otra. Pero a mi lo que me importa es que estas personas continúan dentro del proyecto de Compromís, por lo que el trabajo de oposición no se va a ver afectado. Tenemos el mismo proyecto político.
¿Se ve con ganas de ser alcaldesa dentro de cuatro años?
Me gusta hacer las fotos en el momento que corresponde. Cuando me ha tocado asumir una responsabilidad nunca he mirado para otro lado. Dicho esto, yo hoy asumo liderar la oposición y tener el mejor proyecto de cara a 2027. Cuando llegue el momento si en la configuración del proyecto yo puedo liderar ese papel no miraré hacia un lado. Pero también he sabido aportar cuando me ha tocado estar en segunda o tercera línea. Haré en política en cualquier sitio, siempre.
Papi Robles en un instante de la entrevista para El Periódico de Aquí. LAURA FLORENTINO
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