Alberto García ¿Qué hay más importante para alguien que valerse por sí mismo? Su independencia, su autonomía, su autosuficiencia... ser dueño de sus ambiciones y de sus proyectos...
La mujer no tiene que ser menos que eso, la mujer debe de valerse por sí misma, debe de ser dueña de sus inquietudes y desarrollarlas en igualdad. Sí, en igualdad, sin pensarse ni inferior ni superior a nadie. Simplemente con sus propias capacidades, que son las mismas de cualquier ser humano. Jamás el sexo de una persona puede ser lo que devalúe o engrandezca a una persona. Ante todo personas con capacidades para poder desarrollarse en cualquier ámbito que se proponga.
Pero para desarrollarse, muchas veces hay que creérselo, todos tenemos que creérnoslo. Tenemos que ser conscientes de que nadie está por encima de nadie, que debemos de luchar en igualdad de oportunidades. Que debemos de ser incentivados por igual por lo que desarrollamos y no por quien lo desarrolla. Mujeres y hombres, hombres y mujeres, son válidos por igual, no hay lugar a duda, y esa duda no cabe en nuestra sociedad, en la que el desarrollo de cualquier persona se debe de ganar con los méritos propios, sin detrimento de los demás.
Lo mejor para conseguir la igualdad no es solo creérselo, es demostrarlo, es ser conscientes de lo que se vale como personas y ser capaces de hacerlo ver. Hacerlo ver con oportunidades, oportunidades en las que realmente no existan cotas, porque no hagan falta, porque a nadie se le pueda ocurrir jamás que ser de un sexo u otro pueda suponer una ventaja frente al otro. Pero sobretodo, mujeres que peleáis por un sitio en la sociedad, pelearlo con fuerza y ganas, sin distorsiones, esto no tiene que ser una guerra de sexos, sino un creer en algo y desarrollar ese algo. Él no dejarse llevar por eslóganes fáciles que cubren hoy en día la propaganda de un gobierno, sino por hechos que haya podido desarrollar cada uno de esos gobiernos.
¿Qué va más en defensa de la mujer? ¿Qué se le dé oportunidades reales en la sociedad o manifestarse en plena pandemia? Quizás si no estuviéramos en esta triste pandemia que nos ha quitado en un año a 100.000 personas no sería ni cuestionable que son importantes ambas situaciones, pero quizás hayan hecho mucho más gobiernos que han apostado por tener a mujeres que han roto el techo de cristal ocupando por primera vez liderazgos en Congreso, Senado, Ministerios, Autonomías y Europa, que los que se dedican a defender salir a la calle a manifestarse como si nada, cuando en una mesa de la terraza de un bar solo pueden consumir juntas cuatro personas. Tal vez por muy feminista que pueda ser la mujer de la hostelería, del comercio, o de cualquier otro tipo de negocio en el pueda desarrollarse profesionalmente para luchar por sus derechos, vea más necesario que las mujeres y hombres hoy luchen por solucionar la problemática sanitaria y económica que les haga recuperar sus empleos que por portar pancartas.
Si hay que reinventarse que se haga, pero que sea para tomar verdaderas medidas que nos hagan iguales en la sociedad para defender nuestros derechos con méritos y no con propaganda.
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