Unión Progreso y Democracia (UPyD) exige al
Ayuntamiento de Valencia una respuesta rápida y global a los continuos problemas
que está ocasionando el deficiente funcionamiento del servicio público de bicicletas
‘Valenbisi’. Para la formación política, ''el éxito inicial de esta promesa electoral del
equipo de gobierno de la señora Barberá era ansiada y muy demandada por la
ciudadanía, pero comienza a desinflarse ante la errática marcha del sistema
informático que lee las tarjetas magnéticas de los usuarios. Así, los ordenadores no
detectan con altísima frecuencia las bicis que hay en los terminales, incluso cuando la
estación está al completo''.
Para el coordinador local de UPyD, Ramón Igual, “es evidente que el Ayuntamiento ha
hecho un esfuerzo con este proyecto, pero no más que otras ciudades españolas que
ya lo tenían antes que la nuestra. Esto empieza a ser una broma de mal gusto.
Funciona fatal. Día a día queda patente de que el Ayuntamiento únicamente apostó
por este proyecto atraído por las ayudas europeas y un golpe de imagen, y no como
una apuesta clara por la movilidad limpia y no contaminante”.
Igual acusa al Consistorio de una “total falta de planificación en este asunto y una nula
voluntad real de promoción del uso de transportes alternativos. Resulta una
incoherencia crear y promover un servicio como este, sin dotarlo de los medios
suficientes, al mismo tiempo que se criminaliza al ciclista con multas, a veces
abusivas, y mientras se mantiene una muy deficiente red de carriles bici dentro de la
ciudad. La cultura de la movilidad sostenible no se consigue a base de chequera y
multas, sino con educación/concienciación y buenas infraestructuras”.
Muchos usuarios de Valenbisi observan que en innumerables ocasiones hay
estaciones con bicis aparentemente disponibles pero el lector de la tarjeta no reconoce
el número. Incluso, hay estaciones al completo, pero la pantalla dice que no hay bicis.
Igual asegura que “el servicio a día de hoy no es fiable. No aspiramos a que sea
infalible pero sí fiable, como cualquier transporte público urbano. Los autobuses de la
EMT o el Metro tienen un funcionamiento mucho más complejo que 275 bicicletas y la
gente confía en ellos para ir a trabajar”.
La formación magenta exige al Consistorio que los 65 trabajadores de la empresa
JCDecaux que se ocupan del mantenimiento y reposición de bicicletas no solo se
centren en las estaciones de más demanda. En este sentido, Igual se queja de que no
se pueden hacer viajes rutinarios con regularidad y facilidad porque “nadie te asegura
que vayas a tener una bici dónde siempre la coges y tampoco tienes garantizado que
la puedas dejar donde tú quieres y aunque tengas otra estación a 300 metros tampoco
tienes la certeza de poder dejarla. El ciudadano busca en este medio un servicio
alternativo y limpio para moverse por la ciudad, pero cada día le compensa menos y
lamentablemente dejará de usarlo”, reconoce.
UPyD propone, además, que el teléfono de incidencias del servicio de numeración 902
se cambie por uno de tarificación normal porque el actual es carísimo. “Creo que se
aprovechan de la situación y de la voluntad cívica de los usuarios de reclamar porque
ahí es donde de verdad ganan dinero”, subraya Igual.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia