Valencia lidera el ranking español de accidentes con motos eléctricas de alquiler

Las cifras registradas en el año 2019 revelan que una de cada 12 motos de alquiler sufrieron algún tipo de siniestro

EFE - 13/07/2022

Una moto eléctrica. /EPDA

Valencia (15,5 %), Sevilla y Madrid (9,5 % en ambas) son las ciudades que presentan un mayor índice de siniestralidad en motos eléctricas de alquiler, y entre las que registran una menor incidencia se encuentran Murcia, Málaga y Granada.

No obstante, en cifras absolutas la ciudad en la que se contabilizó un mayor número de siniestros en 2019 fue Madrid, con 466.

En España, las motocicletas eléctricas de alquiler sufren 10 veces más siniestros que las motos de uso privado y 26 veces más que el resto de vehículos, según concluyen los datos de un estudio elaborado por la Fundación Mapfre para la Seguridad Vial.

Las cifras registradas en el año 2019 revelan que una de cada 12 motos de alquiler -de las 9.882 analizadas en 11 ciudades de España- sufrieron algún tipo de siniestro, un total de 804 en dicho año.

Hasta un 88,8 % de los usuarios de estos vehículos -cerca de 700 conductores- sufrió lesiones leves en accidentes y otro tipo de siniestros, los cuales solo requirieron atención sanitaria en el lugar de los hechos debido a la baja velocidad a la que suelen circular estas motos eléctricas.

En 2019, solo se registró una víctima mortal cuando circulaba en un vehículo de estas características, según los datos oficiales.

Del total de 804 siniestros, casi la mitad se produjeron como resultado de caídas (47 %), seguidas de las colisiones fronto-laterales (18 %) y los alcances (10 %).

El 60 % de los incidentes ocurrieron durante el día, con especial incidencia entre las 14:00 y las 20:00 horas, con el 31,7 %.

Los días de la semana en los que se contabilizó un mayor número de siniestros fueron los jueves (15 %) y los viernes (18 %).

En cuanto a los lesionados, en su mayoría leves, cerca de la mitad tenía entre 25 y 34 años (48,6 %) y la mayoría eran hombre (82 %).

Ocho de los casi 700 heridos no llevaban casco en el momento en el que sufrieron el siniestro y un 1 % no tenía el permiso de conducir necesario para circular con el vehículo.

Estas son algunas de las conclusiones del informe "La contribución del motosharing a la seguridad vial", en el que la Fundación Mapfre recuerda que ninguna moto de estas características cuenta con sistema de antibloqueo de frenos, y para su uso se requiere un casco de tipo jet, que no ofrece una menor seguridad que los integrales.

Fundación Mapfre destaca entre los puntos a mejorar la suciedad que suelen presentar los retrovisores y la dificultad para ajustarlos, así como otras deficiencias en las luces o en el mantenimiento de las motocicletas.

Las conclusiones del estudio proponen, asimismo, la implementación del "pago por uso seguro", que no mediría solo el tiempo de empleo, sino también el cumplimiento de las normas de circulación.

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