No hay costumbre más sana en los municipios de la comarca que "salir a la fresca", un ritual que se sigue practicando en la mayoría de ellos y que consiste en sacar las sillas y las mesas a la puerta de casa para pasar un rato de convivencia con vecinos o incluso con los propios miembros de la familia. Se puede simplemente charlar, leer, jugar a las cartas, al parchís o a cualquier otro similar, pero lo más importante es estar a la puerta de casa tomando lo que se dice "la fresca".
Pero no a todos les parece bien la práctica de esta sana costumbre, que ya ha sido propuesta como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Por ello, el Ayuntamiento de Albuixech ha decidido regularla con una ordenanza municipal, ya que supone una ocupación de la vía pública, hasta ahora un tanto alegal, que puede conllevar problemas de convivencia con el vecindario.
El consistorio ha contado para ello con la colaboración de la Policía Local. De este modo, se autoriza la ocupación de la vía pública con mesas y sillas para "salir a la fresca" en la población, siempre que se cumplan tres condiciones. Por una parte, que no suponga el corte de la calle, por otra que la colocación de mesas y sillas no obstaculice el paso de vehículos por la calzada, dejando un ancho mínimo de 2,40 metros en la misma, ni el paso de peatones por la acera, dejando un ancho mínimo de 1,50.
La última de las condiciones es que no se generen molestias vecinales atendiendo a lo recogido en la ordenanza de convivencia ciudadana. Además, se especifica que estas condiciones afectarán tanto a vías transitables por vehículos como a vías de uso peatonal.
También se puntualiza que cuando se celebre cualquier tipo de evento organizado por el Ayuntamiento, asociaciones o particulares previamente autorizados, siempre y cuando implique el corte de calle, las mesas y sillas se podrán instalar en la zona afectada por el corte sin necesidad de respetar las medidas anteriores.