El alcalde de Canet, Pere Antoni, con los representantes de los partidos polÃticos y los de los trabajadores de Obeikan. - Foto: Ayuntamiento de CanetUna representación de distintos partidos polÃticos presentes en el ayuntamiento de Canet d'en Berenguer, encabezados por el alcalde de la localidad, Pere Antoni, se reunió este jueves con los representantes sindicales de los trabajadores de Obeikan MDF España (CCOO del Hà bitat del PaÃs Valencià y de la Unión Intercomarcal del Camp de Morvedre-Alt Palancia), ante el anuncio e cierre patronal y despido colectivo por parte de la empresa.
Al término de la reunión, Pere Antoni, anunció la presentación, en el pleno del próximo jueves, de una moción respaldada por todos los partidos con presencia en el Ayuntamiento, "mostrando nuestro apoyo a todas las acciones que se lleven adelante con la intención que de, si Obeikan tiene que cerrar sus puertas, se haga en condiciones coherentes y dignas para los trabajadores". "También", añadió, "cabe ponerse en el peor de los escenarios y es que la planta cierre asà que mantendremos reuniones semanales para buscar soluciones para todos, que incluyan recolocaciones de los trabajadores". Además, se propuso la creación de una comisión mixta en la que estén presentes los partidos polÃticos con representación municipal y los representantes de los trabajadores para ver cómo evoluciona esta crisis.
Durante la reunión, el comité ha trasladado la preocupación e indignación de la plantilla ante un proceso que amenaza con dejar en la calle a 153 trabajadores y trabajadoras, muchas de ellas con años de antigüedad, mientras la empresa sigue recurriendo a contrataciones por ETT y plantea un ERE por fases que pretende incluso dejar fuera a la representación sindical desde el primer momento.
Por su parte Carles BertÃ, miembro del comité de empresa y CCOO del Hà bitat del PaÃs Valencià , señaló que "aunque el gesto institucional tiene su relevancia, la situación exige algo más que mociones simbólicas o buenas palabras: es el momento de acciones concretas, de implicación real de las administraciones públicas y de presión polÃtica y social ante una dirección empresarial que pretende cerrar la planta con un desprecio absoluto hacia sus trabajadores y su entorno".
"No vamos a aceptar que se imponga un cierre injusto, ni que se normalice el abandono de toda una plantilla bajo fórmulas que solo buscan diluir responsabilidades. Seguiremos organizando, informando y movilizando para garantizar que la voz de las trabajadoras y trabajadores de Obeikan se escuche donde haga falta", añadió.
