La "dinastía" Gómez Guillen, cada año nos sorprende con su delicadeza y artesanía al organizar el monumental Belén que cuenta con más de ciento cincuenta figuras en movimiento que escenifican los diferentes motivos y misterios del nacimiento del hijo de Dios.
Además de recrear los diferentes paisajes de Israel y Egipto, esta familia cada año nos sorprende con imágenes evocadoras de la historia de Casinos. La blanca cisterna que formaba parte de la calle de San José y la calle de la Santísima Trinidad, con su abrevadero y las caballerías bebiendo, es un punto de partida para recrear nuestra pasada historia urbana. De esa cisterna datada en 1793 queda la piedra que la encabezaba y que se colocó en el lugar que siempre estuvo el día 4 de diciembre de 1997.
Otro de los rincones que sorprenden de esta obra de arte es la ermita de San Roque, inaugurada en 1892, costeada por el pueblo de Casinos en el monte de Chiner; la ermita tiene sus antiguos pilares antes de ser reforzados en 1972; en lo alto de la espadaña, está la campana que suena acompasada, la puerta está abierta y al fondo vemos a San Roque, presidiendo la desparecida escalera que muestra un perro con el rollo colgando en su cuello, al igual que una mujer vendiendo rollos anisados al pie de la escalera en la explanada del recinto, recordando la merienda del 16 de agosto.
No falta la alta chimenea del desparecido racholar, de la que el año pasado se celebró el centenario de su construcción.
¡Cuánto trabajo evocando nuestra historia! ¡Cuánta ilusión invertida en horas para satisfacer la curiosidad del visitante que cada año acude a dejarse empapar de la alegría que supone contemplar esta altruista obra de arte. Repasando el Belén, encuentras los diferentes oficios que conforman la vida de un pueblo, el herrero, el carpintero, los tenderos, los pastores, el lavadero… un conjunto de artes y oficios que dan vida a las personas, que nos hacen ver cómo ha sido y como se ha forjado nuestra historia.
No es una labor sencilla, es una labor delicada, comprometida y exquisita, porque se unen las figuras de mercado, a las figuras hechas manualmente por la familia. Las casas diseñadas al milímetro con las fuentes y los ríos que manan un agua cantarina, que da vida a ese entrañable Belén que con cariño cada año, abre sus puertas en Casinos, en la calle del Músico José A. Tomás.
Todo es pura artesanía y por si faltaba poco, los domingos se celebran con buñuelos de calabaza, Amparo, experta en la materia, no duda ponerse manos a la obra para endulzar la fiesta de la Navidad.
Casinos brinda dulzura, arte y melodía, porque el Belén de la familia Gómez Guillen, reúne todos esos aditivos para hacer la Navidad más humana, más sencilla, más real y más entrañable, pues en el recinto donde se expone esa joya, se ve allá en lo más alto el ángel que anuncia: "Paz en la tierra a los hombres."
Paz a toda esta familia, paz a todo el pueblo de Casinos, paz a todo el mundo y feliz año 2022 y que esta buena familia, nos pueda obsequiar en el próxima año con un Belén, más grande, más entrañable si cabe y más cargado de recuerdos.