El Levante, que lleva dos derrotas en el arranque liguero, busca contrarreloj y antes de que acabe el mercado de fichajes el próximo 1 de septiembre un portero, un centrocampista y un delantero.
Fue el propio entrenador Julián Calero quien se encargó de confirmar, tras perder ante el FC Barcelona el pasado sábado, las necesidades del equipo valenciano, que hasta el momento ha realizado ya nueve fichajes.
El Levante, sin embargo, anda muy justo a nivel económico y, de hecho, todavía no ha podido inscribir en LaLiga a Olasagasti, Matturro, Arriaga y Koyalipou, aunque los tres últimos están lesionados y el primero se acaba de incorporar al trabajo junto al resto de compañeros tras superar una lesión muscular.
El club valenciano, además, tampoco ha inscrito al portero Alfonso Pastor y al centrocampista Víctor Fernández, cuyo futuro parece lejos del Ciutat de València.
Cláusula de Carlos Álvarez
Por otra parte, el director deportivo del Levante, Héctor Rodas, aseguró este martes que no tienen necesidad de vender al centrocampista Carlos Álvarez y ante el interés mostrado por el Benfica luso por el jugador levantinista se remitió a su cláusula de 25 millones de euros.
"No hay ninguna propuesta en firme. En principio sí, nos remitimos a la cláusula", dijo Rodas a los medios de comunicación al abandonar las oficinas del Levante en el Ciutat de València.
Rodas recalcó que el club no tiene "necesidad de venderlo", pero no quiso cerrar definitivamente una posible negociación con el Benfica.
"El mercado está abierto, nosotros confiamos mucho en él, es nuestro jugador franquicia y vamos a ver qué pasa", insistió el máximo responsable deportivo del Levante.
Además, Rodas confirmó que el Levante negocia la incorporación del meta australiano Mathew Ryan, exjugador del Valencia, entre otros equipos, y que es agente libre.