El Grupo Municipal Popular de Gandia ha denunciado públicamente este lunes que un total de 59 niños de entre 0 y 3 años se han quedado sin plaza en las escuelas infantiles solicitadas tras el cierre de las escoletes municipales del Grau y del Raval. Así lo han anunciado en rueda de prensa el portavoz del grupo, Víctor Soler, y la concejala Mar Beltrán, responsable de los asuntos de educación en el partido.
Según han explicado, la situación afecta especialmente a familias sin recursos, con problemas de movilidad, sin vehículo o monoparentales, que ahora deberán desplazarse a otras escuelas más alejadas para escolarizar a sus hijos.
"Esto es un grave problema para familias que pierden la cercanía de las escuelas infantiles y tienen que buscarse la vida para conciliar la vida personal y laboral", ha advertido Soler, quien ha calificado la situación como "una nueva muestra de la falta de gestión a la que nos tiene acostumbrados el gobierno socialista".
Por su parte, Mar Beltrán ha criticado duramente la decisión del gobierno local de cerrar las dos escoletes, asegurando que "cuando tuvimos conocimiento de que iban a cerrarse las escuelas del Grau y del Raval advertimos de que esto pasaría, y el tiempo nos ha dado la razón".
Para la edil popular, "no existe justificación posible para esta situación, especialmente cuando el Consell ha hecho que la educación de 0 a 3 años sea gratuita. El cierre responde únicamente a intereses que en nada benefician a la calidad educativa ni a las familias de Gandia".
Beltrán también ha reprochado al gobierno su incoherencia política: "Lideran el discurso de la educación pública pero, cuando les toca actuar, se quedan en palabras vacías". En la misma línea, ha señalado que la medida "carece de sentido" viniendo de un equipo de gobierno que "se proclama defensor de la educación pública mientras cierra servicios esenciales para las familias trabajadoras".
Durante la comparecencia, Soler ha puesto como ejemplo el caso de una familia residente en el centro histórico que se ve obligada a llevar a su hijo a la escoleta de Santa Anna, con un desplazamiento de hasta 25 minutos. "Situaciones como esta hacen prácticamente imposible la conciliación laboral y familiar, y evidencian la falta de planificación del gobierno local", ha afirmado el portavoz.
El líder del PP ha cargado también contra lo que considera una falta de prioridades del ejecutivo que encabeza el socialista José Manuel Prieto. "Los recortes de Prieto perjudican a las familias que más necesitan de este servicio público. Mientras cierran escoletes, abren salones de boatos que solo responden a sus caprichos políticos".
Para concluir, el PP de Gandia ha exigido al gobierno local que reconsidere su decisión, reabra las escoletes del Grau y del Raval y priorice verdaderamente la educación pública de calidad y la conciliación de las familias. "La ciudadanía no necesita propaganda, necesita servicios que funcionen", ha zanjado Soler.
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Lee aquí la respuesta del equipo de gobierno a las declaraciones del PP