La asociación Family Up ha presentado en el Casino de Agricultura de Valencia el primer estudio sobre maternidades y paternidades en la Comunitat Valenciana, revelando una conclusión central y preocupante: el descenso de la natalidad no se debe a una falta de deseo de formar familias por parte de los jóvenes, sino a la presencia de obstáculos estructurales que impiden hacer realidad este anhelo.
El acto ha contado con la participación de Alicia Grau, fundadora de Family Up; Manuel Fernández, vicepresidente de la Asociación de Familias; Asunción Quinzá, secretaria autonómica de Igualdad y Diversidad; Vicente Mestre, director de Vibo Investment; y MarÃa Muñoz, enfermera y madre de cuatro hijos, quienes han aportado diversas perspectivas sobre la compleja realidad familiar valenciana.
Las claves sobre el informe de la maternidad y paternidad
La principal conclusión del estudio, que ha analizado en profundidad los factores económicos y sociales que influyen en la decisión de tener hijos a través de una encuesta web con más de 300 respuestas, es contundente: "Los jóvenes quieren tener hijos, pero no pueden. Hay factores estructurales que lo impiden", ha afirmado Alicia Grau durante la presentación. El estudio desmiente la idea de una juventud desinteresada en la familia, revelando que muchos encuestados mencionan una "familia ideal" de tres o incluso cuatro hijos, y sitúan la edad ideal para tener el primer hijo en torno a los 28 años.
Sin embargo, la investigación señala factores cómo factores como la edad, la percepción del coste económico, la ideologÃa y la situación económica influyen directamente en el deseo de tener hijos. Algo crucial es que una situación económica precaria disminuye significativamente la intención de formar una familia, una barrera que no era tan determinante en generaciones anteriores.
Necesidad de abordar polÃticas estables
Manuel Fernández, vicepresidente de la Asociación de Familias, ha enfatizado la necesidad de abordar este problema con polÃticas públicas profundas, estables y valientes, señalando que no se trata de un problema individual, cultural o de valores, sino de una cuestión estructural que requiere un compromiso colectivo. Fernández también ha destacado el papel fundamental de las empresas, los medios de comunicación y la ciudadanÃa en general para apostar por la familia.
El estudio también profundiza en la construcción de los hogares, revelando cómo las mujeres en edad laboral avanzada perciben mayores dificultades para formar una familia debido al coste laboral de la crianza y el temor a que la maternidad impacte negativamente en su carrera profesional. Asimismo, se evidencia una disparidad en la percepción de la equidad en las tareas domésticas y la carga mental, donde los hombres tienden a considerar que la distribución es justa, mientras que las mujeres perciben lo contrario.
El problema de la vivienda
Vicente Mestre, desde su perspectiva empresarial, ha abordado un factor crÃtico: el acceso a la vivienda. Durante su intervención, Mestre ha subrayado la escasez de vivienda asequible en Valencia y la necesidad de facilitar el desarrollo urbanÃstico, reducir los costes asociados a la compra y alquiler, y fomentar un mayor compromiso social por parte de las entidades financieras para facilitar el acceso a la hipoteca a los jóvenes. "El problema de la vivienda y el de la familia están estrechamente relacionados", ha afirmado el empresario.
Por su parte, MarÃa Muñoz ha compartido su experiencia personal como madre de cuatro hijos que decidió dejar de trabajar fuera de casa para dedicarse a la crianza, resaltando la incompatibilidad percibida entre el ritmo de vida actual y una maternidad plenamente presente. Muñoz también ha planteado la necesidad de un mayor reconocimiento social y económico del trabajo no remunerado en el hogar, mencionando iniciativas como la cotización por el cónyuge que se dedica al cuidado en TurquÃa.
Las polÃticas actuales no son efectivas
Finalmente, el estudio concluye que las polÃticas actuales de apoyo a la natalidad no se perciben como efectivas, lo que representa una oportunidad para diseñar e implementar medidas más adecuadas y coordinadas. Las conclusiones principales del estudio resaltan la existencia de un deseo significativo de tener hijos, una clara diferencia entre el modelo familiar deseado y el real, y la influencia de múltiples factores en la maternidad y paternidad.
Además, se espera que sus hallazgos sirvan como punto de partida para un renovado compromiso con las familias y la implementación de polÃticas públicas efectivas que permitan a la sociedad a cumplir su deseo de formar una familia.