Imagen de archivo de un alijo de cocaína intervenido en el puerto de Valencia. EFE- Biel Aliño
Un total de 775 kilos de cocaína han sido encontrados este jueves en un contenedor marítimo recibido por una empresa de Jumilla (Murcia) procedente del puerto de Valencia que, según la Guardia Civil, podrían haber sido introducidos en el puerto de origen, en Sudamérica, o en alguna de las escalas, sin que las compañía exportadora e importadora supiera nada.
Al abrir el contenedor, los responsables de la empresa jumillana encontraron centenares de bultos de un kilo con forma de ladrillo que no tenían nada que ver con la mercancía esperada, por lo que decidieron avisar a la Guardia Civil.
Así, los agentes que se desplazaron al lugar realizaron en ese mismo momento los pruebas científicas de la sustancia que contenían los bultos, y constataron que se trataba de cocaína, por lo que se incautaron de todos ellos, que sumaron 775 kilos, uno de los mayores alijos de esa droga en la comunidad murciana.
Según la Guardia Civil, la droga habría entrado a España por el método del "gancho perdido", que consiste en introducirla en el contenedor en el puerto de origen o en alguna de sus escalas sin que la empresa exportadora lo sepa.
Para ello, los narcotraficantes rompen los precintos, meten la cocaína y cierran de nuevo el contenedor, y una vez que llega al puerto de destino, personas que trabajan para la organización criminal retiran la droga tras romper los segundos precintos del contenedor, que son sustituidos por otros.
El fin es utilizar un transporte legal, aparentar que los contenedores no han sido manipulados e intentar eludir los controles policiales y aduaneros.
La droga aprehendida, los efectos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Jumilla
