La alcaldesa de Torres Torres pone un candado en la puerta de la urbanización del Tochar

La discrepancia entre la urbanización del Tochar (Torres Torres) y el Ayuntamiento de la localidad no cesa. La alcaldesa del municipio de la Baronia, Amparo Bolós, ha puesto un candado que impide cerrar la puerta de entrada a la urbanización. Una puerta que, pese a que el Tochar sea pública, normalmente sólo se abre para aquellos vecinos con un código de acceso como medida de seguridad por estar alejada del caso urbano. 

El motivo de que ahora Bolós haya decidido poner un candado tiene que ver con la solicitud por parte de la UME (Unidad Militar de Emergencias) para poder llevar a cabo la semana pasada varias actuaciones en la zona. Así lo traslada la primera edil a El Periódico de Aquí. La primera munícipe relata que llevó a cabo dicha decisión porque, a pesar de que los viales de la urbanización sean legalmente públicos y, por tanto, competencia del Ayuntamiento, "los vecinos solo dejan acceder al Tochar a quien ellos quieren". De hecho, añade, "ya ha habido problemas en otras ocasiones de que se han tenido que llevar a cabo actuaciones de mantenimiento por parte de empresas externas y no se les ha dejado entrar". Además, la alcaldesa remite a que en caso de que hubiera algún incendio -algo probable, ya que la zona tiene riesgo medio-alto- la puerta es la única vía de acceso. 

La decisión de Amparo Bolós con respecto al candado ha provocado malestar en directiva del Tochar. De hecho, "la cadena ya no está donde se colocó y han vuelto a cerrar la puerta". "Esto es ilegal, no tienen autorización para hacerlo. Están en expediente sancionador", señala la alcaldesa. 

Además, cuenta Bolós, la directiva alega que las actuaciones de la UME han provocado desperfectos en el asfaltado de la urbanización. No obstante, afirma Bolós, "eso es falso". "Ellos no querían que la UME fuera", expresa. Se enviaron primero quejas orales por parte del concejal del PSOE y después por parte del presidente de la urbanización. 

La polémica por la puerta en el Tochar no es nada nuevo. Hace unos años se tuvieron que quitar las cámaras de vigilancia de entrada y salida a la urbanización por ser consideradas "ilegales". Tampoco es nada nuevo la discrepancia entre la presidencia de la urbanización con el Ayuntamiento. "Empezó alrededor de 2008, con otras legislaturas, cuando se cambió la presidencia a los que son los actuales concejales del PSPV", expresa Bolós. 

En 2019, por Sentencia, la directiva del Tochar puso un recurso de apelación arrastrado desde la legislatura del PP, que negó el mantenimiento de la urbanización. Se decretó que el Ayuntamiento asumiría la conservación de las instalaciones de titularidad pública, es decir, las calles, las vías de alcantarillado, alumbrado público, etc.