Reunión de la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valencia, en una imagen facilitada a EFE.
La oposición municipal del Ayuntamiento de Valencia, formada por PSPV y Compromís, han criticado la situación vivida en el pleno ordinario de marzo del consistorio valenciano, donde Vox abandonó la sesión para castigar a la alcaldesa María José Catalá que no les había dado el turno de palabra.
En este sentido, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, ha lamentado este jueves que la ciudad esté "en manos de la ultraderecha" y de personas que están "inadaptadas políticamente para ejercer una responsabilidad" y que, además, "marcan la agenda política".
Gómez ha señalado que en el último pleno municipal una "pataleta infantil" de Vox ha impedido aprobar una modificación de crédito de casi 37 millones de euros, que se iban a destinar a pagar becas de comedor, abono gratuito de la EMT para menores de 30 años, fondos Next Generation, mejorar la limpieza de las calles o atender a las personas afectadas por el incendio de Campanar.
La portavoz socialista habla de una "nueva crisis de gobierno" entre la alcaldesa de València, María José Catalá, y sus socios, Vox, asegurando que fue un "momento inédito en el que un grupo minoritario" impidió que se aprobara la modificación de créditos y "dejó en ridículo de nuevo" a la alcaldesa.
"Ya son dos plenos en los que Vox marca la agenda de María José Catalá", ha señalado Gómez, quien ha alertado de que ante la "incapacidad" de la alcaldesa están convirtiendo "el Ayuntamiento en un cortijo político de los ultras, donde el diputado condenado por maltrato Carlos Flores Juberías se ha convertido en un asiduo conferenciante".
La portavoz socialista ha destacado la "guerra frontal que ha iniciado este Ayuntamiento contra las mujeres desde València Activa u organizando jornadas de adoctrinamiento", quien ha lamentado que Catalá sea "rehén de los caprichos de Vox porque decidió entregar València a este grupo minoritario que ha demostrado con creces que es un grupo irresponsable".
Gómez ha tendido la mano a la alcaldesa "si realmente quiere dejar de ser rehén de los ultras y no comparte sus posiciones reaccionarias", pues pueden "acordar cuestiones importantes para la ciudad", siempre que tenga una voluntad de acuerdo y de diálogo que "hasta ahora no ha demostrado".
Compromís: "Catalá es una alcaldesa débil"
Por su parte, la portavoz adjunta de Compromís per València, Gloria Tello, ha catalogado como "insólito" y un "espectáculo" la crisis de gobierno vivida en el pleno. En su intervención Tello ha querido contraponer lo sucedido con los ocho años de gobierno de coalición entre Compromís y PSPV, en el que "nunca había pasado un hecho así porque siempre estaba el diálogo y la responsabilidad que pide la ciudadanía de sus instituciones".
Para la portavoz adjunta, María José Catalá es una alcaldesa "débil", porque "este esperpento no se había visto nunca y esto es lo que ocurre cuando entran partidos como Vox en las instituciones".
Ahora mismo, según Tello, Catalá "debe elegir entre gobernar en minoría llegando a acuerdos puntuales con las fuerzas democráticas, como le ofrecimos desde Compromís, o seguir cediendo ante el chantaje de la ultraderecha".
De hecho, ha afirmado que Vox "se ríe de las instituciones" y las utiliza para hacer "su circo particular".
"El numerito de Vox lo van a sufrir los vecinos y la gente más vulnerable -ha advertido-. Este acuerdo nos está haciendo perder demasiadas cosas ya: tiempo, recursos, esfuerzos y la imagen de ciudad. Es un acuerdo muy tóxico para València".
El PP habla de "pacto fuerte y sano"
Mientras tanto en el PP, el portavoz municipal de Valencia, Juan Carlos Caballero, del PP, ha asegurado este jueves que el pacto de gobierno con Vox en el Ayuntamiento está "fuerte y sano" y "no está en peligro", así como que la alcaldesa, María José Catalá, "no se plantea ahora mismo un cambio de competencias".
"El pacto de gobierno está sano y no está en peligro. Lo vamos a llevar adelante. Sabemos y tenemos muy claro qué es lo importante para este Ayuntamiento, y es servir y hacer políticas para los valencianos y volver a hacer de València una ciudad dinámica, abierta, emprendedora y amable", ha sostenido.
"No se debe expulsar a la iniciativa privada y que la improvisación no sea la que marca las políticas de la ciudad. En eso estamos", según Caballero, para quien "el pacto de gobierno está fuerte, está sano" y van a trabajar "por lo más importante, que es resolver los problemas de los valencianos".
Sobre las críticas de que el PP está sometido a Vox y que eso puede influir en políticas como las de la mujer, ha defendido que "en numerosas ocasiones la alcaldesa ha dicho que las políticas de igualdad están garantizadas".
"Los concejales del PP y todo el gobierno municipal va a defender las políticas de las mujeres en todos los ámbitos", ha afirmado, a la par que ha recordado que la Concejalía de Igualdad "impulsa de manera transversal todas las políticas de igualdad en la ciudad y por tanto, no está en riesgo ninguna".
"Ayer en el pleno desmotamos las mentiras de la izquierda de que se iban a acabar todas las políticas de igualdad y de emprendeduría para mujeres. Eso no es verdad", ha afirmado.
"Es falaz que estén en riesgo", según Caballero, quien ha recordado que, según el acuerdo de la Comisión de Hacienda, todas las políticas de empleo femenino "se van a mantener como están" y ha defendido que las políticas de liderazgo de la mujer, de reducción de la brecha salarial y de promoción de la igualdad real ente hombres y mujeres las llevará la Concejalía de Igualdad y las impulsará en todas la áreas de gobierno.
Caballero también ha sido cuestionado sobre si Catalá tiene previsto hacer algún cambio en las competencias del Ayuntamiento y sobre cómo convencieron a los concejales de Vox para volver al hemiciclo después de que lo abandonaran.
"La alcaldesa no se plantea ahora mismo un cambio de competencias como le retó a hacer Vox", ha afirmado para explicar que los ediles de Vox "entendieron que el pleno no había finalizado y volvieron a terminar el último punto".
Respecto a la modificación presupuestaria que quedó pendiente de aprobar por no estar Vox en el pleno y que incluye, entre otras cuestiones, un millón de euros para atender necesidades por el incendio de Campanar, ha señalado que se aprobará en el próximo pleno.
"El presupuesto está porque la incorporación del superávit se hizo, y ahora toca hacer esta modificación en el pleno siguiente para dotar a los servicios de ese remanente que se había generado", ha concluido.
