¿Qué valoración tienes de las dos legislaturas que has trabajado en Algemesí?
Creo que hemos conseguido uno de nuestros mayores propósitos que era salvaguardar la igualdad de oportunidades y potenciar el sector industrial, el empleo y la agricultura. Lo hemos hecho con proyectos como la creación de OTEA (Oficina Técnica y Económica de Algemesí), el plan de reactivación industrial, el plan de revitalización agrícola, el programa Itinerants y Activa Raval, la xarxa llibres, las becas… De hecho, hoy en Algemesí hay 103 empresas más respecto a 2015 y 1.437 personas más afiliadas a la seguridad social.
¿Ha tenido momentos duros en la alcaldía?
Sí, por supuesto. El incendio de Biocom, las inundaciones, el toro que se escapó de la plaza, el incendio de la vivienda del Raval en el que murieron un padre y su hija. Siempre ocurren cosas que te hacen sentir impotente y que querrías poder haber evitado.
¿Qué lección se lleva de una legislatura tan atípica como la actual marcada por la pandemia?
Que la ciudadanía, ante momentos de adversidad, reacciona de manera madura, sobre todo si percibe que quien lidera el Ayuntamiento tiene capacidad de respuesta.
¿Se ha sentido apoyada por el resto de grupos municipales en momentos importantes?
Durante la crisis del COVID, sí. Pero creo que cada uno debería analizar su nivel de madurez política e institucional y su capacidad para llegar a consensos. Y aquí incluyo a todos, incluso al propio equipo de gobierno. En momentos de incertidumbre todos deberíamos unirnos para trasladar certeza a la ciudadanía.
¿Cuáles considera que han sido las fortalezas de su gobierno? ¿Y las debilidades?
La principal fortaleza ha sido que, desde el primer momento, teníamos clara nuestra hoja de ruta, sabíamos lo que había que hacer, lo que Algemesí necesitaba. Y, a pesar de las crisis que hemos vivido y de haber de modificar crédito para no dejar caer la economía local, nuestra buena gestión económica nos ha permitido llevar a cabo todas las inversiones previstas. Las debilidades siempre vienen marcadas por los errores. Todos los que tomamos decisiones nos equivocamos y somos conscientes de que nuestros fallos afectan a miles de personas.
A nivel económico, ¿Cuál es la situación en la que dejarán las arcas municipales en mayo de 2023?
Dejaremos un presupuesto mayor del que nos encontramos. En 2015 estaba entorno a los 18 o 19 millones y en 2023 el presupuesto será de 25 millones. Eso también se debe a la gran aportación de la Generalitat y de la Diputación. Al mismo tiempo habremos reducido la deuda que nos encontramos.
¿Cómo le gustaría que recordaran su paso por la alcaldía?
Lo más importante es que la gente perciba que hemos contribuido a mejorar su calidad de vida, a mejorar los equipamientos de nuestra ciudad, a tener un entorno más sostenible y con una mejor movilidad.
¿Repetirá en las listas de las elecciones de 2023? ¿Por qué?
Sí. Nuestro proyecto no está finalizado. Queda mucho por hacer y me siento con la energía que este puesto requiere para seguir trabajando.
¿En qué se basará la precampaña?
La precampaña y la campaña deben basarse en el futuro. Hablar del pasado es aburrido. Hay que seguir sentando las bases del Algemesí que queremos para los próximos 50 años.
¿A qué retos se enfrenta Algemesí?
Los más importantes son la recuperación de la agricultura y la promoción del suelo industrial. Ambos elementos van a asegurar trabajo de calidad para la ciudadanía y que Algemesí siga progresando. Otra cuestión fundamental es la transición ecológica. Hemos de conseguir reducir los precios de las energías a base de apostar, de manera definitiva, por las energías verdes que nos permitan autoabastecernos.
¿Tiene ambición por continuar escalando en la política?
La política es una vocación. Pero ambición y escalar son palabras que no me gustan. Yo prefiero centrarme en aquello que depende de mí que es la alcaldía y que para mí es ahora una prioridad. Pero yo siempre estaré disponible para mi partido. No concibo mi vida sin estarlo, tanto si es para ocupar un cargo de responsabilidad como si es para acudir a las asambleas de mi agrupación. Siempre estaré vinculada al PSOE y a la política de uno u otro modo.
Son muchos ya los ayuntamientos que se han puesto las pilas en la transición energética, ¿en qué punto está Algemesí?
Hemos impulsado una serie de ayudas para que la ciudadanía pueda instalarse placas solares en sus casas. Tenemos 300 días de sol al año en esta tierra. Hay que aprovecharlo. También hemos instalado placas en el edificio del mercado municipal, que podrá ser autosuficiente. Nos gustaría hacerlo en más edificios, pero el anterior gobierno alquiló los tejados a empresas privadas para 25 años. Me parece una falta increíble de amplitud de miras. Intentaremos también llevar energía verde a los polígonos e ir extendiéndola después al casco urbano. Pero todo eso requiere de inversiones importantes, por eso estamos trabajando los fondos europeos. Necesitamos ayuda para poder hacerlo.
La igualdad y la lucha contra las violencias machistas también han sido fundamentales para sus gobiernos, ¿cómo están trabajando en estos ámbitos?
La concejalía de Igualdad la creamos nosotros, antes no existía. También hemos dotado al departamento de una técnica y una administrativa que trabajan a diario en programas, proyectos y campañas. Además, ya hace varios años que estamos en el sistema VIOGEN del Ministerio del Interior y hemos formado agentes para que se ocupen y hagan seguimiento de la situación de las mujeres que denuncian malos tratos.
¿Cuál es la situación actual de los presupuestos de la localidad para 2023?
Si todo va bien los aprobaremos en el pleno de noviembre. Contamos con 25 millones entre los que destacar los casi 6 que costará el nuevo centro de educación especial Alberto Tortajada o las partidas para realizar los proyectos de la nueva casa de la música y el acondicionamiento de la primera planta del centro de día. Espero que podamos llegar a acuerdos con la oposición para que los presupuestos generen el mayor consenso posible.
¿De qué proyectos se enorgullece más como alcaldesa?
Nuestra reacción a la crisis económica después de la pandemia creo que fue correcta, ayudamos a muchas familias y a muchas empresas. Creo que también hemos hecho un buen trabajo en materia de promoción económica, codo con codo con EMPAL y ACSA y en materia agraria junto con el Consell Local Agrari y Copal. Los proyectos más importantes no son físicos, no son edificios o construcciones, son los que de verdad mejoran la calidad de vida de la gente y garantizan la sostenibilidad económica de la ciudad.
¿Qué proyectos espera finalizar antes de elecciones?
Respecto a las inversiones, la reforma del parque de Salvador Castell que está casi a punto y la piscina de verano. El resto de proyectos que he comentado antes no terminarán nunca porque siempre encontraremos adversidades. Pero hay que seguir peleando por lo que queremos conseguir y estar preparados para cuando lleguen malos momentos.
¿Qué supone para la localidad que la Generalitat Valenciana derribe las 100 viviendas en mal estado del barrio de El Raval?
Para el barrio es un alivio. Supone recuperar un espacio abierto que ayude a mejorar la convivencia de sus vecinos y vecinas. El urbanismo es muy importante para que los barrios sean confortables y agradables. Tenemos muchos proyectos en mente para el Raval y uno de ellos es abrir una zona verde en ese espacio nuevo y crear un nuevo centro de participación ciudadana, más grande, más moderno y más dotado del que tenemos.
¿Cómo ve al socialismo en la comarca?
Lo veo fuerte. Tenemos muchas alcaldías y tenemos posibilidades de conseguir más. También lo veo unido bajo una dirección comarcal que trabaja mucho, que pisa mucho la calle y que sabe cuál es el estado anímico de la gente y los proyectos que necesitamos en nuestra comarca para seguir avanzando. También creo, porque esto también es ámbito comarcal, que Txema Peláez ha hecho un gran trabajo en la Mancomunitat, incrementando el personal e impulsando infinidad de nuevos proyectos y campañas que ayudan, sobre todo, a los pueblos más pequeños.
¿Y a nivel autonómico?
Creo que nadie puede discutir el liderazgo de Ximo Puig. Es un presidente excepcional que ha sabido qué requería cada momento y que siempre ha encontrado soluciones a los peores problemas desde el diálogo, buscando siempre la cohesión y de la mano de la sociedad civil. Ha conseguido levantar la hipoteca reputacional que nos dejó el PP. Bajo sus mandatos hemos pasado de ser conocidos por la corrupción a ser líderes en creación de empleo, en mejoras de los servicios públicos fundamentales como la Sanidad o la Educación y ha proyectado la Comunidad Valenciana como una tierra de oportunidades a la que quieren venir las grandes empresas. Espero que dure mucho tiempo al frente del Consell y del PSPV.
