Ribó anuncia un plan de choque para eliminar la venta de droga y mejorar la seguridad para el barrio de la Malva-rosa

El alcalde de València, Joan Ribó, ha anunciado un plan de choque de seguridad ciudadana para el barrio de la Malva-rosa, que se pondrá en marcha en breve en la misma línea que las actuaciones que se han emprendido en Orriols, dirigidas a mejorar la convivencia y a actuar contra la delincuencia.

Se trata de un plan que se llevará a cabo de manera coordinada entre la Policía Local de València y la Policía Nacional y cuyo anuncio coincide con la cacerolada que llevaron a cabo este jueves vecinos de la Malva-rosa contra la venta y consumo de drogas en sus calles, y los problemas de convivencia que eso está generando.

Convocada por la Asociación de vecinos y vecinas y Amics y amigues de la Malva, la gente salió a la calle cazuela en mano y se concentró en la zona de las cuatros esquinas del barrio, junto a las Casitas rosas, donde se centra principalmente esa venta y consumo.

Ribó, acompañado del concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, se ha reunido este viernes con la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, para coordinar las líneas de colaboración de cara a una actuación más eficaz de la Policía Local y de la Policía Nacional.

Ha recordado que en Orriols ya se ha puesto en marcha una actuación especial para actuar contra los problemas vinculados al tráfico de drogas en el que se lleva trabajando varios meses, y que ha ayudado a una mejora de la situación, y por eso se va a realizar una actuación similar en la Malva-rosa.

El plan de choque incluye trabajo no solo de la Policía, tanto Local como Nacional, sino que comprende también actuaciones del ámbito de la movilidad, del urbanismo, de la educación y de otras áreas, en una acción conjunta, y se asienta en el control de la venta de drogas y de los efectos de inseguridad ciudadana derivados de la delincuencia asociada a la adicción a las drogas.

Desde el Ayuntamiento ya se ha encargado el estudio y la elaboración del plan a los mandos policiales competentes.

Durante la reunión en la Delegación del Gobierno, también se ha abordado el control del fenómeno del botellón, que afecta a distintos puntos de la ciudad, y sobre el que el Ayuntamiento y la Concejalía de Protección Ciudadana han desarrollado una estrategia basada en la anticipación y la contención.

El alcalde ha señalado su satisfacción por cómo está funcionado el control del botellón, y ha citado como ejemplo el fin de semana pasado con la celebración de Halloween; ha agradecido a los jóvenes por entender el mensaje de que la diversión es un derecho, pero que también hay que respetar el derecho al descanso, y ha avanzado que la idea es continuar en otros puntos como Honduras, Cedro o Blasco Ibáñez.

Tras recordar que en breve se incorporarán 53 nuevos agentes a la Policía Local, ha asegurado que comprende las inquietudes y las preocupaciones del vecindario de los distintos barrios de la ciudad, y ha manifestado que València es, en general, una ciudad segura.

Aunque ha bajado la mayoría de los índices de delincuencia y criminalidad, han subido los casos de agresiones sexuales y de género, una cuestión que preocupa al Ayuntamiento, "un problema que hemos de combatir entre todos y en el que se está poniendo muchos recursos para combatirlo", ha concluido.