El Partido Popular de la Comunidad Valenciana ha iniciado su reestructuración a partir del Congreso regional celebrado el pasado fin de semana. Así, Carlos Mazón se erigió como el nuevo presidente popular con el 99,6% de los votos, después de la renuncia de Isabel Bonig y la limitada predilección por su contrincante, José Vicente Anaya. De esta manera, se ha configurado también el organigrama popular, en el que María José Catalá se convierte en la secretaría general. En el Camp de Túria, Elia Verdevío ha sido elegida como secretaria de Transparencia, mientras que Stephane Soriano ha sido elegido secretario de Diversidad. Por su parte, Asunción Quinzá, exconcejala de L'Eliana, ha sido designada secretaria de Interior.
Tanto Verdevío como Soriano han agradecido la confianza depositada en ellos por parte del partido, y el concejal ha alabado el trabajo realizado por el alcalde de Benaguasil, Ximo Segarra, y su apoyo incondicional.
Al Congreso también acudió Pablo Casado, que aprovechó para dejar claros los pilares del Partido Popular y atacar los indultos a los presos del procés. En materia de impuestos, Casado se comprometió a "hacer todo lo posible para que se baje el IRPF un 4 % en la Comunitat, para que esté al nivel de Madrid, Andalucía y Murcia, porque no es posible que en una tierra cosmopolita como esta se paguen los impuestas más altos después de Cataluña y se frene a quienes crean empleo y pagan nóminas".
Sobre la libertad lingüística, el líder del PP ha expresado su compromiso de que sean los ciudadanos quienes elijan la lengua en la que se escolariza a sus hijos o son atendidos en la Administración. "Alguien piensa que para una operación de cataratas es mejor que el médico tenga una certificación lingüística. ¿O es mejor que vengan los mejores? Porque si no, al final sale perdiendo el paciente, que es el paga impuestos", comento.