En la imagen Zaplana a su llegada a la Ciudad de la Justicia. EFE-Ana Escobar
En la imagen, Francisco Grau a su llegada a la Ciudad de la Justicia. EFE-Ana Escobar
En la imagen uno de los acusados el ex president de la Generalitat, José Luis Olivas. EFE-Ana Escobar
En la imagen Vicente Cotino a su llegada a la Ciudad de la Justicia. EFE-Ana Escobar
En la imagen Juan Francisco GarcÃa (centro), a su llegada a la Ciudad de la Justicia. EFE-Ana Escobar
La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia ha acordado la suspensión hasta el 21 de marzo del juicio del caso Erial por la enfermedad del letrado del principal acusado, el expresident de la Generalitat Valenciana y exministro con el PP Eduardo Zaplana.
El abogado y exfiscal Daniel Campos, que ha representado a Zaplana prácticamente desde el inicio de la causa, ha sufrido recientemente una dolencia cardÃaca de la que se encuentra convaleciente.
El tribunal ha adoptado esta decisión tras reunirse, este jueves, con el resto de letrados presentes y escuchar sus posiciones en el inicio de la vista.
Tras acceder a la sala y en apenas unos minutos después de las 10 de la mañana, el presidente de la Sala, Pedro Castellano, ha informado a los presentes del escrito presentado por Zaplana en el que informaba de la baja de su letrado y ha dado la palabra al fiscal.
El representante de Anticorrupción, Pablo Ponce, ha considerado evidente que el juicio no podÃa empezar, por carecer Zaplana de letrado, y ha pedido la suspensión del procedimiento sin que se diese trámite siquiera a las cuestiones previas.
La propuesta del Ministerio Público ha contado con el visto bueno del resto de partes, por lo que se ha acordado la suspensión y se ha fijado la fecha del 21 de marzo para el reinicio.
Tras la conclusión de esta breve vista, Zaplana ha informado escuetamente a los periodistas de que su abogado se encuentra grave (está ingresado en la UCI), pero ha indicado con rotundidad que esperará a su recuperación.
A la salida del juzgado, el exministro ha afirmado al ser preguntado sobre si sigue manteniendo su inocencia que "absolutamente", y respecto a si tiene ganas de que pase este proceso ya, ha manifestado: "Si dios quiere, cuanto antes".
Zaplana -que no llevaba mascarilla como en sus últimas apariciones públicas- se ha mostrado abierto y dialogante e incluso ha pasado a saludar, antes del juicio, a antiguos colegas que están siendo juzgados por la supuesta 'caja B' del PP en las elecciones municipales de 2007 y 2011 en la Sección Segunda, pero se ha negado a estrechar la mano de algunos de sus supuestos colaboradores, sobre quienes se ha publicado que podrÃan estar negociando un pacto con la FiscalÃa.
El 21 de marzo se producirá el tercer intento de celebración de este macrojuicio, tras el de este jueves y el del pasado 9 de enero, cuando se pospuso por primera vez por la baja el fiscal.
El calendario contempla un total de 40 sesiones y la comparecencia de más de 200 testigos.
En el caso Erial, cuya instrucción finalizó el pasado octubre, están investigadas veinte personas, entre ellas los expresidentes de la Generalitat Eduardo Zaplana y José Luis Olivas y la familia del fallecido expresidente de Les Corts Valencianes, exvicepresidente del Gobierno valenciano y ex director general de la PolicÃa, Juan Cotino, además de colaboradores del expresident y exministro y varios empresarios.
La causa afronta su fase final casi seis años después de la detención de Zaplana (el 22 de mayo de 2018), que estuvo en prisión hasta el 7 de febrero de 2019, aunque permaneció ingresado en La Fe por una enfermedad oncológica desde el 18 de diciembre de 2018 al 11 de febrero de 2019.
La FiscalÃa Anticorrupción reclama una condena de 19 años de prisión para Zaplana como máximo responsable de una supuesta trama de comisiones ilÃcitas y blanqueo de capitales que se inició con la privatización de las estaciones de ITV valencianas.
En su escrito de acusación, el Ministerio Público pide el decomiso de 20,6 millones de euros -de los cuales 6,7 ya han sido transferidos a la oficina de recuperación de activos ORGA-, cantidad de la que supuestamente se apropiaron tanto Zaplana como otros catorce procesados, en una operativa de mordidas que se desviaron a paraÃsos fiscales.
