Trabajadores del servicio de Emergencias 112 de varias comunidades autónomas se han concentrado frente al Palau de la Generalitat Valenciana para exigir la gestión pública de un servicio que en la mayorÃa de las autonomÃas está "privatizado, precarizado, con malas condiciones de trabajo y retributivas".
Asà lo ha manifestado el secretario general de UGT en la Comunidad Valenciana, Ismael Sáez, quién ha añadido que "las emergencias del 112 no deben ser un negocio, sino un servicio público de primer orden."
La movilización, convocada por la Sección Sindical de UGT en el 112 de la Comunitat Valenciana, se enmarca en el DÃa Europeo del 112 y ha reunido a profesionales de autonomÃas como Murcia, AndalucÃa, Castilla y León, Cataluña, Illes Balears, Galicia, Euskadi, Cantabria, Castilla-La Mancha y Asturias.
Denuncia y peticiones
Los sindicatos denuncian que este servicio, operativo las 24 horas del dÃa los 365 dÃas del año, está gestionado mayoritariamente por empresas privadas bajo un convenio de "telemarketing" que "no se ajusta a la naturaleza de su labor".
Según los convocantes, esta situación afecta a las condiciones laborales de los trabajadores, cuyos sueldos "rozan el salario mÃnimo", según ha explicado Saéz.
Sáez ha recordado que en comunidades como Asturias y Baleares el 112 es público, mientras que en la mayorÃa de autonomÃas sigue en manos privadas.
El secretario general de la Federación de Servicios a la CiudadanÃa de CCOO, Lucho Palazzo, ha advertido de que la falta de garantÃas laborales "repercute en la calidad del servicio y en la capacidad de reacción ante emergencias".
"Se les aplica un convenio de contact center, con sueldos apenas por encima del salario mÃnimo interprofesional y jornadas muy variables, lo que hace urgente regular y mejorar sus condiciones", ha añadido.
Amparo López, gestora de emergencias, ha explicado a EFE que lo que reclaman es "unas condiciones laborales que nos permitan hacer nuestro trabajo con profesionalidad".
Durante el acto se ha leÃdo un manifiesto en el que se ha reclamado la gestión pública del servicio y el reconocimiento del trabajo del personal del 112, que ha afrontado crisis como la pandemia, el incendio de Campanar o la DANA de octubre.