El base del Valencia Basket Guillem Vives (izda) controla el balón ante un rival. EFEEl Valencia Basket y el UCAM Murcia se enfrentan este domingo en la jornada 15 de la fase regular de la Liga Endesa en el que será un duelo directo por uno de los últimos billetes que quedan libres para acudir a la Copa del Rey y en el que el cansancio de los locales se medirá a la frescura visitante.
El conjunto valenciano afronta este duelo tras otra ajetreada semana en la Euroliga que le deja un brillante triunfo en la pista del Olympiacos y una derrota en la cancha del Estrella Roja, que incluye un punto de decepción puesto que nuevamente fue incapaz de dominar un partido ante un rival teóricamente con menos argumentos.
Desvelado esta semana que el torneo copero se disputará en Madrid y que el Real Madrid ejercerá de anfitrión, el octavo clasificado al final de la primera vuelta será el último equipo que logre clasificarse para el torneo.
A falta de cuatro jornadas para que acabe esta primera ronda, el Valencia ocupa esa posición con un balance de siete triunfos y seis derrotas, el mismo que tiene el UCAM, que es noveno y también el mismo que tiene el BAXI Manresa, que se mide esta jornada al Hereda San Pablo Burgos.
Así pues, del mismo modo que al Valencia una victoria le reforzaría entre los ocho primeros, una derrota le sacaría de esas posiciones y le podría hacer caer hasta la décima plaza.
El equipo murciano, tras un irregular arranque de temporada, ha ganado cuatro de sus últimos seis partidos, y llegará mucho más fresco que el Valencia, pues no ha jugado ningún encuentro en los últimos diez días mientras que su rival en este tiempo ha disputado cuatro choques, aunque con algo menos de ritmo de competición.
El equipo de Jaume Ponsarnau regresó en la madrugada del viernes al sábado a València tras caer en Belgrado y apenas tendrá un día para preparar el choque por lo que dependerá en buena medida de sus propios argumentos y no tanto de los que le pueda desactivar al conjunto murciano. Eso sí, minimizar el impacto en el juego del base estadounidense Conner Frankamp será uno de sus objetivos.
Para el choque, Ponsarnau mantendrá las bajas de los escoltas Vanja Marinkovic y Joan Sastre, pero podrá contar con los otros doce jugadores que completan su plantilla.
