Al
mediodÃa, a la misma hora que se habÃa convocado un minuto de silencio en el
ayuntamiento de la ciudad al que asistieron las autoridades, varias fallas del
barrio en el que se ubica el edificio asà como otros colectivos convocaron otro
minuto de silencio en la zona.
Unas
trescientas personas han acudido a este llamamiento y han guardado ese minuto
de silencio, muchas de ellas visiblemente emocionadas, que han concluido con un
aplauso.
Los
vecinos se han concentrado enfrente del bloque de viviendas calcinadas, en la
confluencia de las avenidas General Avilés y Maestro Rodrigo y junto a las
vallas que siguen perimetrando una zona de seguridad mientras prosiguen las
labores de investigación de lo sucedido.
En
los corrillos de vecinos se comentaba la dimensión de la tragedia y expresaban
su dolor por las personas fallecidas, entre ellas una familia de cuatro
miembros, los padres, un niño de dos años y una bebé de quince dÃas.
También
intercambiaban comentarios sobre las necesidades que pudieran tener las
personas que han perdido sus casas y la reacción que han tenido los ciudadanos
ante ello.
La
gran cantidad de material de todo tipo y alimentos donado por los vecinos en el
local que se habÃa habilitado al efecto ha llevado a que éste permanezca
cerrado ya el fin de semana y con un cartel en el que se da las gracias por la
respuesta pero se avisa que no se aceptan más donaciones.