La degradación del entorno de la Marina está afectando seriamente a este lugar que se construyó con la idea de ser un emblema de la ciudad de Valencia y ahora es una estampa que cada vez acumula más quejas de los usuarios.
Según ha podido comprobar El Periódico de Aquà los ascensores de La Marina no está en funcionamiento, con los problemas que eso causa a las personas con diversidad funcional, las que sufren temporalmente movilidad reducida, o las familias que acuden con su niño en un carrito. Los ascensores fueron desactivados por seguridad en la pandemia, pero según denuncian, no han vuelto a funcionar. A nivel teórico hay un teléfono que puede llamarse para que se activen, por no son pocos los usuarios que se han marchado hartos de esperar sin haber conseguido que se pusieran en marcha.
También preocupa y mucho que no haya un baño público funcional en La Marina, lo que ha llevado a que, según las denuncias vecinales, muchos usuarios en fines de semana opten por orinar en los parkings o en icnluso en las escaleras de acceso a los restaurantes.