Conectar al residente con el turista y fidelizar sus visitas, haciéndole conocer la esencia de la ciudad, es la base de una iniciativa municipal que lleva a la playa de Gandia las fiestas de Fallas, la Semana Santa e incluso al Tio de la Porra, personaje típico que llama a la celebración de sus ferias.
Esa estrategia nació en 2024 con la marca turística 'Gandia a la mar' como un salto más hacia la diversificación del turismo de sol y playa, involucrando a los colectivos culturales para que cuenten al visitante nacional -sobre todo del centro y norte de España- lo que tiene esta ciudad de 80.000 habitantes.
La concejala de Turismo de Gandia, Balbina Sendra, explica que son los propios ciudadanos quienes enseñan al turista qué tiene esta ciudad, trasladando a su famosa playa acciones que a lo largo del año se desarrollan en el núcleo urbano (a casi 3 kilómetros de la costa) para que quieran volver.
Bajo la premisa de que una ciudad buena para vivir es buena para hacer turismo, estas acciones se dirigen a la fidelización del turista nacional, enseñándoles que pueden participar en diversas actividades a lo largo del año.
Gandia está en temporada turística media alta desde marzo hasta octubre y abre sus servicios de playa desde el 15 de marzo al 15 de octubre, la primera de la Comunitat Valenciana en hacerlo con la excepción de Benidorm, que los mantiene todo el año.
Según el último estudio de Exceltur, Solytur 2024, Gandia es uno de los únicos destinos de España -el otro es Adeje- que ha puesto en marcha acciones de puesta en valor del turismo dirigida a la población residente, en el contexto de la necesidad de facilitar la convivencia y el equilibrio entre turistas y residentes.
Fiestas de interés turístico
Los colectivos culturales vinculados a las Fallas -declarada fiesta de interés turístico nacional- y la Semana Santa son los más potentes de la ciudad, además de los de las fiestas patronales de San Francisco de Borja, la primera semana de octubre, con el Tio de la Porra como personaje típico que llama a la celebración.
'Gandia a la mar' tiene programados en la playa desfiles de Semana Santa en abril, actos por el Puente de Mayo, una mascletà nocturna en julio y la plantà y cremà de una falla turística en octubre, y varios pasacalles del Tio de la Porra.
Actividades pensadas para que el turista forme parte de la cultura y las tradiciones, dinamizando la playa a lo largo de todo el año e involucrando a los principales colectivos de la ciudad para que el turista repita destino.
La concejala asegura que creen que el impacto de estas acciones de fidelización es positivo pero necesitan dos años más para constatarlo.
Gandia aumentó un 9 % la ocupación hotelera en 2024 respecto al año anterior y la ocupación promedio alcanza el 84,79 %, consolidando la desestacionalización como muestra el incremento de la ocupación hotelera del 29,58 % en noviembre y del 35,40 % en diciembre. En julio los datos llegan al 94,88 % y en agosto al 96,15 %, según datos de la patronal Hosbec facilitados por el consistorio.
La semana fallera de 2025, pese a la lluvia, ha experimentado un notable aumento de turistas extranjeros -sobre todo ingleses, alemanes e italianos-, atraídos por la oportunidad de conocer por primera vez las Fallas.
El turismo nacional se ha mantenido respecto a otros años y busca conocer más de cerca las fiestas en un destino más cercano y abierto al turista que la ciudad de València, pero a la vez tener la cercanía a la capital para visitarla uno de los días.
Un grupo de periodistas estadounidenses que estuvo en Gandia se mostró sorprendido de haber podido disfrutar "mucho más" de la fiesta, haber podido ver mejor la mascletà y acercarse más a las falleras, ha destacado Sendra.
Más de 79.000 turistas internacionales visitaron Gandia en 2024, un 18,4 % más que en 2023, y se registra un incremento de llegadas fuera de la temporada estival del 45,4 % más en enero, 51,1 % en febrero, 28,4 % en abril y 17,2 % en octubre.
Atracción del nómada digital
La otra vía de captación de turistas, en este caso internacionales, es su posición de destino para el nómada digital: "Hace buen tiempo, pueden practicar deporte, somos un punto estratégico donde moverse por playa y montaña", destaca la concejala.
El perfil del trabajador nómada digital que opta por Gandia es un profesional con formación universitaria de nivel medio o superior con estudios en áreas como tecnología, marketing digital, diseño gráfico, programación, comunicación o emprendimiento, cuya edad abarca entre los 25 y los 45 años.
Su estancia en la ciudad tiene una duración de entre 1 y 3 meses, aunque en muchas ocasiones se extiende más en el tiempo. Eligen Gandia y por extensión la Comunitat Valenciana por la oferta cultural, la vida social activa y un entorno natural atractivo; muchos se interesan por la gastronomía local, el arte y la arquitectura, mientras disfrutan de actividades al aire libre como la playa, senderismo o ciclismo.
Valoran la buena conectividad, el coste de vida accesible comparado con otros países, y la posibilidad de disfrutar de un estilo de vida relajado que ofrece la ciudad.