Manifestación que bajo el lema "Se acabó. Bajaremos los alquileres" tiene lugar este domingo en Madrid. EFE/Chema Moya
Manifestación ayer en Madrid contra los altos precios de la vivienda. EFE/Chema Moya
Entidades cívicas, juveniles y vecinales, colectivos culturales, sindicatos y partidos llaman a sumarse a la manifestación convocada para este sábado por la plataforma 'València no se vende' por el derecho a la vivienda de las personas jóvenes y contra la turistificación masiva que "expulsa de los barrios".
La marcha está convocada a partir de las 18.30 horas desde las Torres de Serranos, donde confluirán las cuatro "columnas" que habrán partido previamente desde Benimaclet, la plaza de América, la plaza de Roma y el Parque Central bajo el lema 'València s'ofega' (València se ahoga), que rememora la riada que inundó la ciudad el 14 de octubre de 1957.
La movilización, que pretende finalizar en la plaza del Ayuntamiento con la lectura de un manifiesto, quiere reivindicar el acceso a una vivienda digna, la defensa del territorio y una regulación que evite la turistificación de Valencia, ha explicado a EFE María, portavoz de 'Valencia no se vende'.
En el eje de la vivienda, los manifestantes reclaman la regulación del alquiler y la parada de todos los desahucios sin alternativa ocupacional digna, así como la desmercantilización de la vivienda y el acceso a una vivienda universal y gratuita.
Igualmente, ha detallado la portavoz, reclaman un parque de vivienda pública digna, poner fin a la discriminación al acceso a la vivienda a personas en circunstancias de vulnerabilidad, prohibir la descalificación de Vivienda de Protección Pública y "acabar con la venta de vivienda residencial al capital extranjero y especulativo".
En cuanto a la defensa del territorio, ha explicado que solicitan que se paralice la ampliación del puerto y todos los PAI de la ciudad, así como una protección activa de la huerta.
Para proteger el territorio, solicitan cuidarlo ante "los proyectos especulativos y de expansión urbana", por lo que abogan por "derogar el nuevo decreto motosierra: necesitamos una protección efectiva de la huerta, revertir el dique norte y la ZAL y mantener vigente la ley de la huerta".
En referencia a las críticas por la turistificación, reclaman declarar València como zona tensionada, prohibir los apartamentos turísticos y la regulación urbanística estricta del negocio hotelero.
Igualmente, consideran que "hay que dejar de apostar por el turismo como motor económico, poner fin a la promoción de la ciudad como destino turístico y parar la entrada de cruceros y las ampliaciones del puerto y el aeropuerto".
Entre los colectivos que forman parte de esa plataforma o han dado su apoyo a la misma figuran el Consell de la Joventut, CCOO PV, Compromís per València, Sumar, Acció Cultural del País Valencià, Ca Revolta, Gremi de Llibrers, Acció Ecologista-Agró, Iaioflautas València, Amics del Carme, Arran y distintas asociaciones vecinales y culturales de la capital valenciana.
Desde el Consell de la Joventut de València consideran la vivienda como "el principal problema del país" cuando la tasa de emancipación apenas es del 16,3 % en las personas menores de 30 años, lejos del 32 % de la Unión Europea, y se tiene que destinar más del 90 % del salario a ese gasto y a los suministros básicos, según los últimos datos del observatorio de emancipación del Consejo de la Juventud de España.
De continuar así, ha advertido de que València pronto se convertirá en "un bonito escaparate para visitar, pero no para vivir aquí", por lo que llaman a la participación activa en las movilizaciones ciudadanas y la implicación en los debates para encontrar soluciones justas a esta problemática.
El Consell de la Joventut hace un llamamiento al gobierno local de María José Catalá para que implemente medidas que fomenten un uso "más equitativo y sostenible" de la vivienda y, además, reclaman medidas urgentes para frenar la turistificación masiva que expulsa a jóvenes de sus barrios.
Para ello, solicitan una aplicación efectiva de la ley estatal de vivienda, la limitación de nuevas licencias para apartamentos turísticos y la creación de políticas que faciliten este derecho a las personas jóvenes, priorizando un parque de vivienda pública que se mantenga en el ámbito público.
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