Las obras del futuro Palacio de la Justicia de Alzira avanzan a buen ritmo. El edificio estará operativo para su uso en el segundo trimestre del año que viene. Así lo ha confirmado la consellera de Justicia e Interior de la Generalitat Valenciana, Salomé Pradas, que ha visitado este lunes las obras.
La inversión, de 21,1 millones de euros, hará posible la modernización de las infraestructuras judiciales de la Comunitat Valenciana. El proyecto se erige como una respuesta para solucionar el problema de la dispersión de las sedes judiciales en la Ribera Alta, un partido judicial que abarca 23 municipios y da servicio a una población de alrededor de 140.000 habitantes.
Los trabajos incluyen la finalización de la estructura y las cubiertas del edificio. Actualmente, se está trabajando en las fachadas, la tabiquería y las particiones internas. La obra tiene prevista su conclusión para el segundo trimestre de 2025.
La consellera ha subrayado la importancia del nuevo edificio, no solo por la magnitud de la inversión, sino también por lo que representa para la modernización de la justicia en la región. Según Pradas, el Palacio de Justicia de Alzira se convertirá en un "símbolo de una Administración de Justicia moderna, de calidad, sostenible y accesible", proporcionando un servicio más eficiente y cercano tanto a los profesionales del ámbito jurídico como a la ciudadanía en general.
El edificio podrá acoger hasta 13 juzgados en el futuro
El edificio, que se está levantando en el número 35 de la avenida Luis Súñer en una parcela de 4.800 metros cuadrados cedida por el Ayuntamiento, contará con cinco plantas y un ático, sumando un total de 11.000 metros cuadrados. Aunque inicialmente acogerá los siete juzgados que actualmente operan en la comarca, el diseño permite albergar hasta trece juzgados en el futuro.
Entre sus características, el Palacio dispondrá de 43 salas para distintos usos, 71 despachos y un aparcamiento con 65 plazas. Se ha diseñado con un aforo máximo de 900 personas, que incluye a 200 profesionales que trabajarán en las instalaciones y 700 usuarios. El edificio será completamente accesible y estará dotado de modernos sistemas de seguridad y confort térmico, respetando criterios de sostenibilidad.
En la planta baja del nuevo Palacio de Justicia se habilitará un juzgado de guardia con acceso independiente las 24 horas y una sala de bodas. Desde el vestíbulo principal se podrá acceder al Registro Civil, que estará ubicado en el primer piso junto a seis salas de vistas con accesos diferenciados. Estas salas contarán con espacios específicos para testigos y áreas protegidas para que las víctimas puedan preservar su identidad.
La primera planta también albergará servicios como la Abogacía y la Procura, el Servicio de Orientación Jurídica, la Oficina de Asistencia a las Víctimas del Delito, el Instituto de Medicina Legal, la Unidad de Valoración Integral Forense, el Gabinete Psicosocial y una Cámara Gesell para entrevistas a menores o testigos vulnerables. En las plantas superiores se ubicarán los trece juzgados previstos y las dependencias de la Fiscalía.
Modernización de la justicia en la Comunitat Valenciana
El proyecto del Palacio de Justicia de Alzira se enmarca en el plan de la Conselleria de Justicia e Interior para modernizar las infraestructuras judiciales en la Comunitat Valenciana. Según Salomé Pradas, la nueva sede no solo resolverá los problemas actuales de dispersión, sino que está diseñada pensando en el futuro para ofrecer un servicio más eficiente y cercano a la ciudadanía.
La consellera destacó que este tipo de infraestructuras son esenciales para garantizar un acceso a la justicia más ágil y cómodo para los usuarios, al mismo tiempo que mejoran las condiciones de trabajo de los operadores jurídicos.