El Port de Sagunt recuerda al padre Jaime Pons

El pasado miércoles 5 de febrero, a las 20:00 horas, tuvo lugar el acto inaugural de la exposición en homenaje al padre Jaime Pons en la Casa Municipal de Cultura. La muestra, que podrá visitarse hasta el 28 de febrero, reúne 22 fotografías recopiladas a lo largo de los años, así como diversos objetos personales del sacerdote, entre ellos su última bicicleta, prestada por la parroquia Virgen del Carmen, y una máquina de escribir junto a un manuscrito en el que expresaba su repulsa por la encarcelación de un ciudadano. También se exhibe una entrada del mítico cine que impulsó el padre Jaime, cedida por el joven Frank Jordán.

El acto contó con la presencia del alcalde, Darío Moreno, quien moderó y clausuró la ceremonia, acompañado por los concejales Ana María Quesada, Raúl Palmero y Eva Cayuela. También asistieron los párrocos de distintas iglesias locales: Ciro Weffer (Nª Sª del Carmen), Lucas Blanes (Nª Sª de Begoña y Nª Sª de los Desamparados) y Gilberto Claro (Jesús Obrero y San Jaime Apóstol), además del inspector de guardia de la Policía Nacional en representación del comisario, Carlos Peris.

Entre los asistentes destacó la presencia del exportavoz del Partido Popular, Sergio Muniesa, quien en la anterior legislatura presentó y defendió una moción en el pleno del Ayuntamiento para garantizar actividades en homenaje al padre Jaime. Vecinos de Canet d'en Berenguer, municipio donde el sacerdote ejerció entre 1948 y 1952, han tomado conciencia de la importancia de preservar su legado y han manifestado su intención de rendirle homenaje en su localidad.

El padre Pons llegó al Port de Sagunt el 1 de septiembre de 1947 y desempeñó una intensa labor pastoral y social. Fue consiliario de Acción Católica y trabajó en la rehabilitación del templo parroquial de San Pedro de Canet. En 1954 se convirtió en el primer párroco de Nª Sª del Carmen, donde fundó un cine parroquial, una academia y un pre-seminario, además de promover la construcción de viviendas para la comunidad. También creó las cofradías de Nª Sª del Carmen y la Virgen Dolorosa. Su entrega por los feligreses y los más necesitados se mantuvo hasta su fallecimiento el 19 de agosto de 1974, en fama de santidad.

El legado del padre Jaime sigue vivo en la memoria del Port de Sagunt y otras localidades. Se están impulsando diversas iniciativas para lograr el máximo reconocimiento de su figura a nivel social, político y religioso, con el objetivo de abrir su causa de beatificación. Como expresó el alcalde, Darío Moreno, en el acto, "su dedicación y entrega han sido un cálido sol que ilumina nuestros días, perdurando hasta el presente. Su compromiso con las familias y su tenacidad en inculcar valores de solidaridad y generosidad han sido fuente de inspiración".

A casi cincuenta años de su fallecimiento, el afecto hacia el padre Jaime se mantiene intacto. Su tumba sigue recibiendo visitas constantes y gestos de gratitud.