Las playas del sur de la provincia de Valencia continúan este martes cerradas al público tras detectarse un posible vertido marino y a la espera de los resultados de los análisis que se están realizando para determinar su origen y el material de los restos aparecidos en la arena, algo que podría conocerse hoy.
Fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente han indicado este martes a EFE que esa es la recomendación que se ha realizado a los ayuntamientos afectados por este vertido, entre los que se encuentran Daimús, Guardamar de la Safor, Bellreguard, Miramar o Piles.
Según las mismas fuentes, la Conselleria colabora con Capitanía Marítima en la realización de análisis complementarios y se intenta poder tener hoy mismo los resultados.
Según la imágenes y vídeos difundidos este lunes por los diferentes ayuntamientos afectados, se trata de unas bolitas de color blanco, similares a granos de arroz, cuyo material se desconoce por el momento, que han aparecido a lo largo de toda esta parte del litoral.
En redes sociales, el Ayuntamiento de Guardamar de la Safor sigue este martes con su recomendación de evitar el baño hasta confirmar la naturaleza del posible vertido, con presencia de un material desconocido en la arena.
También indica que el episodio afecta, por el momento, la franja costera comprendida entre el espigón de Gandia hasta Guardamar y que desde el Ayuntamiento están en contacto permanente con las autoridades para hacer el seguimiento y garantizar la seguridad a la ciudadanía.
La última información del Ayuntamiento de Miramar al respecto, también en redes sociales, informaba este lunes de que los equipos municipales habían precintado las entradas de la playa y los socorristas de Cruz Roja habían avisado a los bañistas para que salieran de la arena.
En Piles, el Ayuntamiento también comunicó ayer el "cierre temporal" y "preventivo" de la playa tras la detección el posible vertido marino, que explicaba que afecta el litoral desde el espigón de Gandía hasta Piles, y de momento no ha actualizado la información.
El consistorio pidió a la población no acceder a la zona de la playa hasta nuevo aviso y explicó que se estaban llevando a cabo análisis y tareas de control por parte de los servicios técnicos y medioambientales competentes.