Lo que empezó como una "cruzada personal" para ayudar a afectados por la dana, Carlos Bermell lo ha profesionalizado con nuevas técnicas y ya ha conseguido recuperar fotos familiares, archivos empresariales o apuntes de unos 200 discos duros que quedaron arrasados a consecuencia de la riada del 29 de octubre.
Asà lo cuenta este dueño de una empresa de València (EB Consultores) dedicada al mantenimiento informático y que ahora, con cuatro compañeros, se dedica a devolver la alegrÃa a muchos particulares, profesionales y empresarios que creÃan que todos sus recuerdos, datos empresariales y de trabajo se habÃan perdido bajo el agua y el barro.
El 99 % de la información se recupera
Aunque su empresa, con veintitrés años de experiencia en el sector, está ubicada en València y no se vio afectada por el temporal, sà que lo hicieron varios de sus clientes ubicados en la zona cero de la dana, como un empresario de un polÃgono de Chiva.
"La nave quedó devastada pero pudo recuperar algunos ordenadores y un dÃa me los trajo para tratar de recuperar la información. Suerte que los pudimos recuperar y pasamos la información a un disco nuevo, y asà podrÃa volver a empezar la actividad de su empresa", relata.
Empezó a funcionar "el boca a boca" y un vecino del empresario le dijo si podÃa traerle sus ordenadores: "Limpiar barro se me daba bien pero ya habÃa miles de personas haciéndolo, y vi que era más interesante dedicarme a lo que se me da bien".
"Mandé a mis amigos y grupos de clientes un whatsapp con mi teléfono por si necesitaban ayuda o conocÃan a alguien que la necesitara para recuperar discos duros de sus ordenadores. Al principio no hice publicación en redes sociales, solo el boca a boca y este mensaje. Luego ya lo puse en Facebook y LinkedIn", detalla.
Carlos cuenta que hubo dificultades por la falta de movilidad en la primera semana de la dana por las restricciones y porque muchos se habÃan quedado sin vehÃculos. "Quedaba en puntos donde ellos pudieran ir andando y a mà me dejaran pasar con el coche como a la puerta de Ikea o el polÃgono de Catarroja", explica.
"Empezó con gente cercana y ya me llamaba gente que no sabÃa quién era; un abogado lo puso en su grupo de compañeros del turno de oficio y una librerÃa de Benetússer en el de la asociación de comerciantes", recuerda. Ahora habrá procesado ya "unos doscientos discos duros".
Detalla que aquellos más modernos con tecnologÃa de discos sólidos se están recuperando al 99 % y la información "se vuelca a un sitio seguro", pero en los modelos más antiguos que incorporan un motor y tecnologÃa más mecánica, "la recuperación no es tan acertada y será sobre un 70 %".
Fotos, apuntes y facturas
"Se están recuperando muchÃsimos. Me viene gente de lo más variopinta, un particular que vivÃa en un bajo en Massanassa o una persona que tenÃa una librerÃa en Benetússer o un despacho de abogados. Traen en sus discos todo tipo de recuerdos e información", añade.
"Recupero la información y no veo si es una foto o una factura, pero la gente te cuenta lo que tiene en el ordenador y hay historias impresionantes. Una persona me dijo que tenÃa las fotos de su hija fallecida hace cinco años y no las tenÃa en papel, y otro que tenÃa una copia de seguridad en su casa -que está muy bien- pero vivÃa en un bajo y fue arrasada y ha perdido el original y las copias".
Agrega que gente más joven tenÃa en su portátil en casa con "fotos, sus cosas o apuntes de la universidad".
De una cruzada personal a la profesionalización
Insiste en que al principio se lo tomó como "una cruzada personal para ayudar a toda la gente afectada" porque vio que habÃa "mucha necesidad: "Nadie sabÃa qué hacer; incluso habÃa quien vio sus ordenadores embarrados y los tiraron, lo que es un error porque por mal que esté, cuando rescatas el equipo del fondo de un metro de barro, se puede recuperar la información".
Junto a Carlos trabaja en la tarea Arseny Aparicio, de la empresa Infoaparicio, con quien comparte profesión y local, y les ayudan Juanma del Olmo y Sandro Duarte, además de que externamente cuenten con dos amigos de dos empresas más de informática, Fernando MartÃn y Marcelo Sergio Camaño.
Juanma le dijo que podÃan incorporar alguna tecnologÃa de empresas expertas profesionales en recuperación de datos y lo hicieron: una bañera de ultrasonidos con la que limpia en profundidad las pequeñas placas que llevan los discos duros.
"Lo que tú puedes hacer con agua y un cepillo, la bañera lleva alcohol isopropÃlico, se baña con ultrasonidos y se hace una limpieza más profunda. Discos duros que no habÃamos recuperado los hemos conseguido recuperar a raÃz de incorporar este sistema, por eso digo que nos empezamos a profesionalizar, además de que incorporamos un sistema de etiquetado para lo que Ãbamos recibiendo que atendemos en orden de llegada", señala.
¿Un deseo? "Que la gente no tire nada, por favor, que lo lleven a algún informático, y que no intenten arreglarlo por su cuenta ni siquiera intenten encenderlos aunque parezca que están bien".