A consecuencia de la DANA, una gran parte de la población de Torrent se ha visto obligada a usar otros medios de transporte por la inexistencia de línea de metro hacia Valencia. Los autobuses lanzadera fue el sistema que la Generalitat Valenciana eligió para intentar suplir esta necesidad de transporte, unas líneas que, desde febrero, han ido cambiando su recorrido y frecuencia.
El portavoz del grupo Compromís - Podem - Esquerra Unida, Xavier Martí, ha expresado su preocupación porque después de cinco meses de interrupción del servicio de Metrovalencia "se han perpetuado las largas colas, con la consecuente pérdida de tiempo". Esto es un hecho que sufren miles de personas que pierden diariamente horas para poder acceder a un bus que les lleve a sus puestos de trabajo, al Hospital o a realizar gestiones necesarias en otros municipios, especialmente en la ciudad de Valencia.
"La gente llega tarde a sus trabajos y la incompetencia del gobierno de la Generalitat no es causa de justificación laboral", ironiza Martí. De hecho, comenta que en el momento de redactar la presente noticia, la situación se ha visto agravada por la avería de dos autobuses y la falta de un conductor.
Tema recurrente
No es la primera vez que Martí ha denunciado este hecho: "hemos hablado en otras ocasiones, tanto en los plenos municipales, como en diferentes notas de prensa, sobre lo que está suponiendo para la ciudadanía estas deficiencias, la falta de seguridad y los problemas de adaptación de los autobuses, especialmente en el caso de las personas con discapacidad".
La situación actual es "inaceptable", señala, porque "no pueden normalizar retrasos de horas; esto refleja una clara falta de gestión y de mantenimiento en un servicio esencial, más todavía si desconocemos cuando volverán a operar las líneas de metro".
El representante de la coalición en el Ayuntamiento ha exigido que el gobierno de Mazón y de Amparo Folgado ejerzan de una vez sus responsabilidades en materia de transporte público: "es urgente aumentar la frecuencia de las líneas, especialmente en las horas de gran afluencia, así como garantizar la condición óptima de los vehículos en materia de seguridad y discapacidad".
"Merecemos un transporte público eficiente y ajustado a las necesidades actuales que solucione la falta de responsabilidad que arrastramos desde el 29 de octubre", ha concluido Martí.