El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga y el director general corporativo de Corporación F. Túria S.A, Javier Carpi, han suscrito esta mañana el convenio que faculta la construcción de la nueva carretera en el término de Riba-roja de Túria, que podrá fin a una histórica reivindicación vecinal por la afectación del paso continuado de camiones por medio de la urbanización, que se estima entre 300 y 500 camiones diarios. Al acto ha asistido una representación de las entidades vecinales de Buenavista y La Llobatera, junto con los tenientes de alcalde, Teresa Pozuelo y José Luis Ramos, así como el concejal de Urbanizaciones, Rafa Gómez.
En virtud de este convenio, la empresa realizará una aportación económica de 900.000 euros que financiará parte de la obra, cuyo proyecto técnico será presentado antes de final de 2025. El consistorio se encargará de la expropiación de las parcelas afectadas que resulten necesarias para la ejecución del camino.
Las reivindicaciones vecinales se remontan a 2002 y desde entonces los residentes de la zona no han cesado en reclamar la construcción de una nueva carretera alternativa que desviara el paso de camiones que acceden desde la CV-370 a las instalaciones de la cantera Carasoles, para así evitar el peligro y las molestias de ruido y polvo, que el continuo paso de vehículos pesados provoca al discurrir por la única carretera de acceso a la instalación.
Desde 2015 las conversaciones del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria con las asociaciones vecinales y la cantera Corporación F. Túria han sido permanentes, lo que ha permitido realizar algunas acciones puntuales, como la limpieza de la calzada con agua para evitar el exceso de polvo o la construcción de badenes, para reducir la velocidad de los camiones.
Tras la firma, los representantes vecinales de los cerca de 600 vecinos y vecinas de la zona, han agradecido tanto al Ayuntamiento como a la cantera el esfuerzo realizado para la materialización del convenio "es gran satisfacción que nos permite poner el cronómetro a cero y estaremos vigilantes para el cumplimiento del mismo". Ambas partes han acordado la creación de una comisión que realice el seguimiento de los trámites previos a la obra y su ejecución.
Mientras concluye el ansiado desvío, los vecinos solicitan "un refuerzo en el mantenimiento, tanto en lo referente a limpieza como al estado de la propia carretera que presenta desperfectos por el excesivo uso". También, el alcalde les ha trasladado que el Ayuntamiento seguirá trabajando en la construcción de un carril ciclo-peatonal que conecte la CV-370 con la urbanización, una vez concluyan las obras y cese el paso de camiones, así como el reasfaltado del vial para evitar la actual acumulación de agua en la vaguada existente.
El convenio suscrito esta mañana incluye que una vez adjudicada e iniciada la ejecución del nuevo vial, la empresa se compromete a agilizar la restauración del hueco minero.
El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga ha agradecido a la empresa 'su buena disposición y entendimiento con los vecinos y vecinas de la zona para poner fin a una reivindicación histórica". Raga ha recordado el compromiso del gobierno municipal de cerrar las canteras y cumplir "el compromiso con todos los vecinos de velar por el respeto a la legalidad vigente y reparar el enorme impacto ambiental que las mismas han provocado en nuestro entorno".